Informan Raquel Brisa y Patricia Montañana / Imágenes: Club Encuentro
El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo ha manifestado que el momento en el que vivimos «nos encontramos en un momento de evolución, no de revolución» en el marco de la conferencia que ha pronuncia en torno a “El futuro de la justicia en España” en el acto al que asistió invitado por el Club Encuentro Manuel Broseta. Un encuentro dirigido por Amparo Matíes que se celebró en el hotel SH Valencia Palace y que fue retransmitido en directo vía YouTube a través del canal corporativo del club, contando con la presencia de miembros de la asociación y autoridades políticas como la consellera de Justicia de la Comunidad Valenciana, Gabriela Bravo.
En el comienzo de la conferencia, el ministro de Justicia presentó su plan de justicia 20-30 estructurado en tres bloques: el diagnóstico de la justicia actual, el por qué de la Justicia 20-30 y el cómo aplicarla. En este sentido, Campo explicó durante su intervención que el objetivo principal, a día de hoy, no es otro que el de modernizar la justicia, evitando contaminación y ruido mediático que pueda entorpecer la tarea. Asimismo, dejó clara su definición de Justicia, la cual no se limita a organizaciones y entramados burocráticos: “La justicia también son valores y servicios públicos”, explicó.
La pandemia del coronavirus ha sido la causa por la que se han tenido que acelerar los cambios que se tenían que acometer. “Estamos en el comienzo de un nuevo tiempo”. Este nuevo ciclo, según desarrolló el ministro en su ponencia, se basa en cuatro pilares fundamentales del cambio: la crisis económica, la revolución digital o cuarta revolución industrial, la desigualdad creciente a nivel social y el feminismo. Además, el ministro quiso destacar el papel clave que jugarán las juristas en este nuevo ciclo: “el siglo XXI es el siglo de las mujeres”.
“La justicia no sirve de nada si la sociedad no la entiende”
Con este cambio de época, la sociedad requiere de una reconstrucción de mundos de manera conjunta, sin importar colores ni partidos. Para ello, el ministro apeló a la concordia y a la cooperación entre instituciones el mismo día en que PSOE y Podemos registraron la iniciativa de reforma del Consejo General del Poder Judicial para neutralizar el bloqueo del PP. Campo no quiso hacer declaraciones a la prensa, pero reconoció que el CGPJ está siendo “tema de actualidad estos días” y rogó a los asociados que hicieran las mínimas preguntas posibles al respecto. El ministro insistió en que es necesario poner en marcha una justicia sostenible e inteligible. “La justicia no sirve de nada si la sociedad no la entiende”, aseguró.
Finalmente, el ministro de Justicia apeló a la sociedad civil para dirigir la mirada hacia el futuro: “La nueva normalidad ha venido para quedarse”, apuntó. Ante ello, es necesario sincronizarse con la realidad cambiante de manera que se aumente la mediación y se reduzca la ligiticiosidad. La justicia necesita miradas globales, directas a la realidad y, para ello, esta ha de ser accesible, eficaz y al mismo tiempo contribuir a un proyecto para el país común a nivel ecológico, tecnológico y, sobre todo, social.