Valencia, a 10-12-2020.-  “Nacer en el amor a un equipo de fútbol es tan importante que ni todo el oro del mundo puede torcerlo; ese amor no se compra”. Así lo ha asegurado José Antonio Martín Otín, “Petón”, esta mañana en la Universidad CEU Cardenal Herrera. El popular comentarista deportivo ha impartido una charla sobre “el amor al escudo y el fútbol moderno” vinculada al Título de Especialista en Dirección y Gestión Deportiva que imparte desde este curso la institución universitaria.

A lo largo de su intervención, el ponente ha realizado un repaso de numerosos ejemplos del amor al escudo demostrado por diferentes jugadores y clubes, internacionales y nacionales, y ha recordado a los estudiantes que el fútbol no es solo un negocio, sino pasión, “y eso no hay que olvidarlo nunca”.

‘En Valencia se dio una de las respuestas futbolísticas más hermosas contra eso tan repugnante que es el racismo, con sus estrellas Waldo y Wanderlei’

Uno de los ejemplos mencionados por el invitado ha tenido como protagonista el fútbol en Valencia en las décadas de los 50 y 60, cuando se dio, en su opinión “una de las respuestas futbolísticas más hermosas contra eso tan repugnante que es el racismo: los dos delanteros centros de los dos equipos, (Valencia CF y Levante UD), sus dos estrellas, eran dos chicos negros y hermanos, ídolos de la afición, Waldo y Wanderlei”, ha recordado.

Durante su charla, “Petón” se ha referido a la ley de sociedades anónimas deportivas, de principios de los 80, que ha calificado de “tropelía”, y que supuso una ventaja para los clubes a los que no les afectó, “por situación económica saneada, como el Osasuna”, o por lo que ha denominado “excepciones políticas”, “como el Atletic Club de Bilbao y especialmente FC Barcelona y Real Madrid, que, desde entonces han jugado con ventaja a la hora de no tener el control que han tenido  los demás, y también porque en ningún caso pudieron verse amenazados por intereses ajenos a esa línea de amor al escudo”.

Las consecuencias de esta ley han sido, en su opinión, muy negativas para el fútbol español, “porque se ahondó en las diferencias y se hizo mayor la brecha entre pequeños y grandes clubes”, algo que también, ha afirmado, ha tenido su reflejo en el tratamiento informativo en los medios de comunicación.

‘La ley de sociedades anónimas deportivas hizo mayor la brecha entre pequeños y grandes clubes’

Tras esa ley, “ha habido clubes que han tenido mucha suerte pero, la mayoría, todo lo contrario”, ha proseguido José Antonio Martín. “Ha habido bendiciones como la familia Roig en el Villarreal, que supo entender que aquello era un escudo y bajo aquel escudo, mucho más que un paraguas en tiempo de tormenta, cabían todos los que lo amaban”, ha subrayado. “El éxito de este club, ha añadido el ponente, ha sido un buen entendimiento de la realidad futbolística y mantener por  encima de cualquier otra cosa ese sello de amor. Y no todo el mundo ha podido decir lo mismo”.

El vicepresidente del Villarreal, entre los asistentes a la charla de «Petón»

A lo largo del turno de preguntas, “Petón” también ha entrado a valorar la reciente polémica en redes por el aniversario de la renovación del escudo del Atlético de Madrid: “Una buena idea se puede invalidar si no lo contrastas con la afición; tienes que persuadir al aficionado y subirlo al carro, esas cosas hay que hacerlas juntos”, ha señalado.

En relación a la entrada de inversores en los clubes, el ponente ha advertido: “Es importante estar muy atento para ver quién entra en tu casa para gobernarla”. En lo referente a las claves para mantener la buena marcha de un equipo, el también consejero delegado del SD Huesca, ha puesto el acento en el equilibrio: “Tener la cabeza tranquila, permitirá obtener buenos resultados”, ha contestado.

Petón es el cuarto ponente del ciclo de charlas de la CEU UCH vinculadas a su nuevo título de Especialista en Dirección y Gestión Deportiva. Hasta la fecha han participado en el mismo el vicepresidente del Villarreal CF, José Manuel Llaneza, el presidente de LaLiga, Javier Tebas, y el abogado deportivo Juan de Dios Crespo.

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