Quien se proponga cambiar su estilo de vida, buscar motivación en otro deporte o proponerse nuevos retos debería probar, al menos una vez en su vida, el triatlón. Así lo asegura el profesor del Grado en Ciencias de la Actividad Física y Deporte del CEU de Castellón Alejandro López Valenciano. Y explica las razones en este artículo.
El triatlón es, posiblemente, uno de los deportes más admirados entre la población general, y sus deportistas son encumbrados, en muchas ocasiones, a la categoría de superhéroes/superheroínas por combinar varias disciplinas deportivas al mismo tiempo.
Para aquellos que no estén familiarizados con él, se trata de un deporte relativamente nuevo, de los años 70 (aunque hay referencias de alguna competición de los años 20), que consiste en realizar tres disciplinas basadas en los deportes de resistencia más famosos: la natación, el ciclismo y la carrera a pie, en orden y sin interrupción entre una prueba y la siguiente. El tiempo que el triatleta tarda en cambiar de una disciplina a la siguiente se denomina transición.
Quienes lo practican simplemente son personas que han perdido el miedo a lo desconocido y se han lanzado a por algo que les motiva. Y eso ha cambiado por completo su vida
Dr. Alejandro López Valenciano. Profesor del Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte del CEU en Castellón
El triatlón cuenta con multitud de distancias (desde supersprint a distancia Ironman), que pueden ir desde 20-25 minutos de duración hasta 17 horas, y de alternativas. Es decir: en los últimos años se han ido combinando dichas disciplinas de diferente manera para ampliar el abanico de pruebas (duatlón, acuatlón, aquabike, swimrun…) y eso ha provocado que sea uno de los deportes que más ha crecido y que mayor visibilidad ha tenido, sin dejar de ser un deporte minoritario.
Fuera miedos
Sin embargo, aunque diferentes estudios han mostrado que practicar deportes que combinan varias disciplinas, como el triatlón, produce mayores beneficios para la salud y la condición física que otros, muchas personas tienen miedo a iniciarse y conocer sus bondades. Quizá porque creen que está orientado solo a superdeportistas o porque infravaloran sus propias capacidades.
Mi experiencia como deportista y entrenador me lleva a concluir que la visión que se ofrece/tiene de este deporte no se corresponde con la realidad. Y, aunque pueda parecer partidario, tantos años trabajando en este sector me han permitido conocer cientos de historias diferentes que me llevan afirmar que todo aquel que se proponga cambiar su estilo de vida, buscar motivación en otro deporte o proponerse nuevos retos debería probar, al menos una vez en su vida, el triatlón. Claro está, que debe hacerlo de manera pautada y progresiva. Y, para ello, los clubes de triatlón son los mejores referentes, porque se han convertido en promotores de salud donde se unen personas de diferentes características y condiciones con un nexo y un objetivo comunes: ¡pasárselo bien!
Adaptado a cada uno
El triatlón consigue lo que otros muchos deportes no. Es decir: no caes en la rutina ni el aburrimiento, puesto que ejercitas cada día algo diferente. Además, es probablemente, junto con el atletismo, el deporte con mayor alternativa de pruebas. Dicho de otro modo: si tienes miedo al agua (aunque un buen entrenador puede resolver este problema), puedes probar el duatlón o triatlón de invierno; si no te gusta la bicicleta, el swimrun; si no te gusta correr, el aquabike…
El triatlón ha sabido reinventarse y abrirse al público general para, precisamente, eliminar esos miedos y prevenciones.
En definitiva, no hay superhéroes/superheroínas en este deporte. Quienes lo practican simplemente son personas que han perdido el miedo a lo desconocido y se han lanzado a por algo que les motiva. Y eso ha cambiado por completo su vida.