Fernando de Rosa aboga por remodelar la justicia

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El vicepresidente del CGPJ apuesta por los asuntos, y no por los juzgados

Alba Poveda / 4º Periodismo
 

El vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Fernando de Rosa, apuesta por una remodelación de las estructuras básicas de la administración judicial española para mejorar la calidad del servicio. Una transformación que pasa “necesariamente” por acabar con la adhesión del juez a un juzgado específico, y apostar por el binomio magistrado-asunto, según De Rosa.

El vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial, Fernando de Rosa. / CGPJ
El vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial, Fernando de Rosa. / CGPJ

El juez destaca la importancia de ofrecer al ciudadano un servicio público de calidad. Para ello, el magistrado aboga por “la introducción de la tecnología, un cambio legislativo y el fomento de la agilidad procesal”. Desde el CGPJ se está apostando por una oficina judicial moderna en la que el juez no se dedica a gestionar un juzgado, sino a resolver con agilidad asuntos concretos.
Asimismo, el vicepresidente incide en la necesidad de introducir la flexibilidad a los juzgados a través de una nueva ley de demarcación y planta. En este sentido, se entiende que los juzgados han de situarse en aquellos lugares donde haya una mayor concentración de procesos. Una medida que, además de reportar agilidad al sistema, sería más acorde con la realidad.
Ante una justicia fraccionada, “se corre el riesgo de que merme la calidad del servicio”, apunta De Rosa. Este tipo de sistema proporcionaría una justicia de primera, situada en las grandes ciudades, donde la sociedad está atendida por grandes jueces y psicólogos, y otra de segunda. Para promover una justicia igualitaria, el magistrado subraya que el sistema “no puede medirse en kilómetros”. Para agilizar los procesos en ocasiones es mejor que el ciudadano tenga que desplazarse a otra ciudad donde se dictamine antes la sentencia.

Crisis y justicia
De Rosa, que inauguró el nuevo ciclo de conferencias de la Universidad CEU Cardenal Herrera, Tribuna CEU con una reflexión sobre cómo la justicia puede ayudar a salir de la crisis económica, asevera que España es un país fiable para invertir puesto “su jurisprudencia es segura”.
El magistrado califica a los juzgados como el termómetro de la crisis económica. De hecho, la justicia civil y mercantil es la “catalizadora” de la difícil coyuntura y, por tanto, la que mayor saturación sufre, afirma. Por ello, el vicepresidente del CGPJ cree que es necesario para aliviar la carga de trabajo y apostar por la creación y ampliación de más juzgados civiles. Los asuntos relacionados con empresas, por ejemplo, requieren una resolución rápida, “ya que si la sentencia tarda tres años, puede ser que la compañía no sea viable, y entre en concurso de acreedores”, explica el magistrado.
En cuanto a la reforma laboral que ha llevado a cabo el Gobierno de Rajoy, De Rosa indica que su reciente aprobación no permite conocer el impacto que ha tenido en la administración judicial. Sin embargo, el juez sostiene que los juzgados de lo social -encargados de los asuntos laborales- ya han sufrido un impacto en su dinámica por la crisis económica. Asimismo, el magistrado indica que, si es necesario, se reforzarán estos juzgados para “ofrecer un servicio eficaz”.

Imagen y justicia
Ante la pregunta de si la sociedad ha minusvalorado alguna decisión judicial, De Rosa sostiene que solo un 1% de las sentencias dictadas crean conflicto social. Por tanto, “el otro 99% avala la buena calidad del servicio ofrecido por el sistema judicial”, subraya el vicepresidente del CGPJ.
Los 4.500 magistrados que conforman la administración judicial se enfrentan al año a nueve millones y medio de casos, lo que demuestra la carga laboral que tienen los juzgados. Por ello, De Rosa indica que el gasto “no debe consistir en crear más juzgados, sino en tener más jueces”.

Formación
La formación de los encargados de la justicia española es fundamental, según el magistrado, para ofrecer un sistema eficaz. Por ello, al igual que se ha promovido la posibilidad de ampliar la formación de aquellos que quieran acceder a la abogacía a través del Máster de Acceso a la Abogacía, De Rosa apuesta por que se tenga en cuenta una formación adicional para aquellos licenciados que quieran hacer una oposición para acceder a la magistratura.
De hecho, el vicepresidente del CGPJ recalca que es necesario “reforzar la profesionalización para mejorar más si cabe la magistratura”.

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