“El amor de la Iglesia a los pobres forma parte de su tradición”

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Cardenal Óscar Andrés Rodríguez Madariaga, presidente de Cáritas Internacional

Hombre afable, de excelente carácter y un gran  comunicador. En la conferencia que impartió el cardenal de Tegucigalpa y también presidente de Cáritas Internacional, Óscar Andrés Rodríguez Madariaga, en las Semanas Sociales de Santander, quedaron plasmadas todas estas facetas. Realza con fuerza el papel de la mujer en el voluntariado y pide que la Iglesia salga al encuentro del hombre en una época en la que la pobreza “está más presente que nunca”: “Debe ser un acercamiento desde el amor, la escucha y la cercanía al necesitado”.

Silvia Palomino/2º Periodismo; Francisco Pertusa/ 3º Periodismo

Silvia Palomino entrevista al Cardenal de Tegucigapa. / Silvia Blas
Silvia Palomino entrevista al Cardenal de Tegucigapa. / Silvia Blas

Pregunta. ¿Qué le parece que algunos critiquen las ayudas que percibe la Iglesia con la labor que hace Cáritas en esta época?
Respuesta. Muchas de estas críticas de las que me hablas vienen de una falta de información preocupante. Si la gente conociera el bien que se está haciendo, estoy seguro de que no quedarían indiferentes ni descontentos. Se critica a base de prejuicios y no de pruebas. La Iglesia y Cáritas no reciben ningún beneficios, sino simplemente algo de retribución por el bien que hacen, que es muchísimo más grande que el que un presupuesto pueda contemplar.
P. ¿Además de la aportación estatal siguen llegando ayudas particulares a Cáritas?
R. Me llena de orgullo decir que uno de los signos positivos de esta situación es que la ayuda de las personas no ha disminuido y esto es un claro signo de esperanza. Mientras algunos gobiernos lo primero que hacen es recortar las aportaciones a los pobres, Cáritas es todo lo contrario.
P. ¿Qué destacaría de la relación de la Iglesia con la pobreza?
R. El amor de la Iglesia por los pobres pertenece a su tradición y la impulsa a dirigirse a un mundo en el que la pobreza está alcanzando formas gigantescas. La opción por los pobres está implícita en la fe cristiana y en la identidad de Cáritas. En el servicio a ellos también estamos acercándonos al Señor crucificado. Debemos tomar conciencia de que Jesús siempre sale al encuentro del hombre y nosotros lo estamos representando.
P. En muchos de los mensajes que difunde Cáritas se indica la necesidad de ensalzar la parte afectiva, ¿qué quieren conseguir con esto?
R. Existe un fuerte desequilibrio actualmente entre el yo cerebral y el yo sentimental, con un claro predominio del primero. Las ideas muchas veces son frías y en Cáritas queremos que la gente se comprometa de corazón con los pobres, como transmite Dios en su mensaje.
P. ¿Se le dedica tiempo a la escucha de esa palabra de Dios?
R. Si se le pregunta a los cristianos de quién son discípulos, dirán que de Jesucristo, pero la mayoría le dedicará menos de quince minutos a la escucha de la palabra. Somos más discípulos de la prensa, de Internet o de la moda. Tenemos cuatro siglos de hambre y sed de palabra.
P. ¿De qué manera se adapta Cáritas a esta situación?
R. Soy plenamente consciente de todos los spots que se realizan a nivel mundial y me encantan. Sabemos que hay que tener presencia en las nuevas tecnologías y creo que nos estamos adaptando bastante bien a esto.
P. ¿Cuál es el papel de la mujer en la obra de Cáritas?
R. Esencial. Muchos de los que reclaman un mayor protagonismo no son verdaderamente conscientes de cuál es el que tienen en nuestra obra. La gran mayoría de todo el voluntariado que tenemos son mujeres y todas son muy competentes en las labores que realizan.

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