Para el conde de Lavern, la labor de los cristianos que integran la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén está en “luchar para que los lugares que pisó Jesucristo no se conviertan en espacios de desolación”

Jacinto de Maristany y de Ybarra, lugarteniente de España Oriental de la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén, ha afirmado que “la paz llegará algún día a Tierra Santa por la luz que lleven los cristianos y no por la labor que realicen los políticos”.

El lugarteniente y conde de Lavern ha realizado estas declaraciones durante el transcurso de la presentación de la primera edición del libro ‘La Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén’ que ha tenido lugar en el Palacio de Colomina, sede de la Escuela de Negocios de la Universidad CEU Cardenal Herrera, que ha estado moderada por el doctor del departamento de Humanidades de la CEU-UCH Emilio Callado y que ha congregado a una numerosa audiencia.

Para de Maristany, la labor fundamental de los 27.000 cristianos de todo el mundo que integran esta Orden está en “luchar para que los lugares que pisó Jesucristo no se conviertan en espacios de desolación y evitar que Tierra Santa se convierta en un parque temático donde solo se visite por razones turísticas”.

Eduardo-Manrique Tejada, presidente de la Sección del Reino de Valencia de la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén, ha descrito ante los asistentes la labor que la Orden realiza en la actualidad. “Los donativos de nuestros integrantes nos permiten cubrir los gastos del orfanato de Belén, de cincuenta escuelas y centros de acogida para niños discapacitados que tenemos en Tierra Santa”, ha afirmado.

Por otra parte, Raúl Romero, doctor en Historia del Arte de la CEU-UCH, ha realizado un recorrido de las diferentes órdenes de caballería desde su origen con especial hincapié en la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén y ha destacado que la labor actual de las órdenes vigentes está en la realización de “labores benéfico-caritativas y en velar por las necesidades materiales y espirituales de los cristianos de Tierra Santa”.

El acto ha concluido con la entrega de una placa con la Cruz de la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén por parte del conde de Lavern a la Universidad CEU Cardenal Herrera en agradecimiento a la excelente acogida y trato recibido por este centro universitario.

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