Informa Marc Férriz / Imágenes: MBFWMadrid
Madrid ha acogido recientemente la celebración de la Mercedes-Benz Fashion Week en su 76º edición. Una nueva cita con la moda en la que diseñadores consagrados y emergentes han presentado sus propuestas que marcarán el estilo de la próxima temporada. La 76º edición de MBFWMadrid ha vuelto a constatar la importancia de esta cita mundial con la moda, también plataforma de promoción y difusión de la moda española en el mundo.
El evento, organizado en IFEMA MADRID, ha vuelto a convertirse en el lugar de encuentro y referencia de la industria de la moda donde profesionales, diseñadores y prensa convivieron y compartieron proyectos, reflexionando en torno al futuro de la industria. Miles de personas fueron también las que no quisieron perderse esta cita en la que todos los visitantes pudieron disfrutar de un área, al Cibelespacio, en la que las marcas patrocinadoras de la pasarela desarrollaron diversas actividades relacionadas con el mundo de la moda. Interesante fue también disfrutar del Showroom de Allianz EGO, una plataforma de venta directa al público de creaciones realizadas por diseñadores jóvenes.
Propuestas de calidad de los grandes diseñadores de la moda española
La Mercedes-Benz Fashion Week arrancó con una primera jornada dedicada íntegramente a los diseñadores que conforman el Programa OFF de MBFWMadrid, con desfiles en diversos espacios urbanos de la capital de España. García Madrid, María Lafuente, Félix Ramiro, Roberto Verino, Odette Álvarez, Pilar Dalbat, Nicolás Montenegro y Paloma Suárez fueron los protagonistas de esta iniciativa en la que también se incorporó, por primera vez, Rafael Urquízar, quien también presentó su colección en un evento exclusivo.
Uno de los grandes nombres de la moda española de autor, Andrés Sardá, fue el encargado de inaugurar el programa oficial con una colección inspirada en el mundo del cine en la que destacó la actriz Najwa Nimri, quien desfiló como una modelo más. El desfile se articuló en torno a cuatro temáticas: un homenaje al cine en blanco y negro, los documentales, los musicales y la fantasía acaparando la atención de todos los asistentes.
Junto a Sardá destacó también el desfile de Duyos con una propuesta original al ofrecer un desfile coreográfico con motivo de la celebración del 25º aniversario de la firma. Duyos presentó un desfile muy personal inspirado en Estonia, con una selección de looks que evocaron la tradición del país, desde una visión contemporánea en la que destacó la reinterpretación de los trajes tradicionales estonios.
Por su parte, Ágatha Ruiz de la Prada volvió a captar la atención de los visitantes con una colección muy personal en la que destacó la propuesta en los tejidos utilizados. Una colección firmada en colaboración Pyratex, empresa española especializada en innovación textil sostenible especializada en la creación de tejidos que utilizan fibras innovadoras a partir de plátano, alga, madera, algodón o poliéster reciclado. Una fuerte apuesta por la moda sostenible que logró llenar de color la pasarela con una colección donde Ruíz de la Prada reunió todos los sellos icónicos de la marca haciendo las delicias del público asistente.
La 76ª Edición de la Mercedes-Benz Fashion Week también ha supuesto el gran regreso a la pasarela de Ulises Mérida, quien hizo desfilar a sus modelos a ritmo de pasodoble interpretado por una orquesta en directo. Él fue el protagonista de esta edición con la mejor colección de la semana de la moda en Madrid donde jugó con las formas y los colores recreando sus famosos volúmenes, tejidos y patrones, a través de un viaje retrospectivo hacia su propia infancia donde tomó como punto de partida e inspiración el recreo del colegio. El desfile comenzó con tonos blancos, impecables, que dieron paso a rojos mezclados con fucsias, amarillos y azules marinos donde tomaban el protagonismo los tejidos como el popelín de algodón, el lino, el crochet y el denim. Los estilismos se completaron con joyas de inspiración natural y enormes sombreros que daban el toque final a una colección que mostró a Mérida en estado puro.
Ulises Mérida se alzó con el premio por la mejor colección, recayendo el galardón a la mejor modelo de esta edición en la sevillana Lorena Durán que desfiló para Pedro del Hierro y Dolores Cortés, entre otros. Una edición que también ha logrado una gran diversidad de modelos emergentes reflejando la pluralidad que existe en la vida real con todo tipo de tallas y edades, e incluso modelos embarazadas.
Diseñadores emergentes: el futuro de la moda española
La Mercedes-Benz Fashion Week también tuvo espacio para los jóvenes diseñadores en la pasarela Allianz EGO donde se pudieron ver las creaciones de Evade House, Corsicana, Mush, Arturo de la Rosa, Kollapse, Crack, David Moss, Xvstrange y Boltad, este última galardonada con el premio Mercedes-Benz Fashion Talent con una colección en la que aunó con originalidad un material como es el plástico con la idea del silencio ruidoso, un concepto que forma parte de la propia marca. Un discurso creativo, único, que está presente en la utilización del aerógrafo, la creación de prendas y accesorios a mano, así como distintas piezas de cerámica que completan la colección. Diseños de prendas con carácter urbano que llamaron la atención de las nuevas generaciones abordando una serie de temas que afectan a los jóvenes en la actualidad.
La firma Crack también destacó en la MBFWMadrid con un arranque impresionante del desfile donde una la modelo irrumpió sobre la pasarela, abriendo una colección que reflexionó sobre las carencias de la infancia y su impacto en la edad adulta, algo que se refleja en prendas desestructuradas o acabados deshechos, dominado por una estética Y2K en prendas denim y colores como el rosa chicle o azul bebé.
Finalmente, fiel a su estilo, David Moss también destacó entre os diseñadores emergentes con una colección que sumergió al público en un onírico universo donde cada fase del sueño se visibilizó en colores y formas diferentes. Diseños blancos transportaron a los asistentes a la fase no REM del sueño mientras que los negros intensos dividieron esta fase del sueño profundo donde las pesadillas y las alucinaciones tomaron forma en voluminosos vestidos de volantes, lazos y tejidos acharolados.