La CEU-UCH preparará desde septiembre a profesionales con un posgrado especializado en Formación Avanzada en Fisioterapia Oncológica

fisioterapia oncológica
Una paciente oncológica durante una sesión de fisioterapia

Cada año se diagnostican cerca de 280 mil personas con cáncer en España, según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Pese a la magnitud de estas cifras, también hay otras razones que invitan a la esperanza a muchos pacientes. Y es que, gracias a los avances tecnológicos, mejora de los tratamientos y al diagnóstico precoz, cada año más 100 personas lo superan. Aun así, según los expertos, es necesario combatirlo desde distintos frentes. Uno de ellos, con la fisioterapia oncológica. Esta especialización permite evaluar y tratar las alteraciones producidas por el cáncer y sus tratamientos, en cualquier momento del proceso oncológico e independientemente de la edad del paciente. Así lo entienden Maribel Rocha y Marta Gómez, expertas y directoras del posgrado en Formación Avanzada en Fisioterapia Oncológica, que la Universidad CEU inicia el próximo mes de octubre.

“Los pacientes oncológicos, independientemente de su edad, tipo de cáncer o estadio en el que se encuentren, sufren alteraciones motoras, sensitivas, dolor, fatiga… Situaciones que merman su bienestar, capacidad de recuperación y calidad de vida”, aseguran estas especialistas. Por ello, la fisioterapia oncológica proporciona la ayuda necesaria a estos pacientes. Para recuperar sus capacidades funcionales y restablecer la independencia en sus actividades de la vida diaria, por ejemplo. Pero, también, para mejorar la calidad de vida que pueden haber perdido debido al cáncer o sus tratamientos, advierten. “En definitiva, tiene un papel fundamental en la mejora de los pacientes con cáncer, los supervivientes de cáncer y en los pacientes que requieren de cuidados paliativos”.

Para Marta Gómez, fisioterapeuta especializada en oncología, el posgrado que comienza en octubre de 2022, amplía al conocimiento humano no sólo lo físico, sino también lo emocional y social de los fisioterapeutas. “Les habilita de una conciencia del ser, desde la compasión, empatía, la escucha activa y el amor incondicional”. Además, tiene un componente necesario en los abordajes que realicen los fisioterapeutas. “Esta formación no sólo aborda al paciente oncológico, también a las familias. Ambas necesitan un acompañamiento humano para su camino evolutivo, porque viven en una situación de incertidumbre y miedo. Aprender a gestionar los pensamientos rumiantes genera una paz interior que repercute directamente en la parte física”, concluye.

Tratar las dolencias físicas de un cáncer

Los pacientes oncológicos desde el abordaje médico viven un trasiego de pruebas y de un miedo interno, por conocer sus resultados. “Las revisiones están muy bien, pero en ocasiones se sienten desamparados por no tener una explicación de lo que le está ocurriendo. Todo se basa en medicación, tratamiento de quimioterapia y/o radioterapia”, apuntan ambas expertas. Y lanza una cuestión: ¿qué ocurre cuando el paciente presenta una dolencia física como consecuencia del cáncer y / o de su tratamiento? “Suele acudir al fisioterapeuta… pero le pasa lo mismo, se sienten mejor, pero sigue su dolencia. Mi experiencia con pacientes oncológicos me ha hecho ver que los fisioterapeutas no están formados al completo para abordar a este tipo de pacientes”, añade Marta.

A partir de esta experiencia, tanto ella como Maribel Rocha, profesora en el grado de Fisioterapia del CEU, han trabajado a conciencia cada punto necesario que debe integrar el Fisioterapeuta que se encamine por la atención a los pacientes oncológicos. Tanto para la prevención como para la rehabilitación y recuperación de las secuelas del cáncer y sus tratamientos. Y es que el fisioterapeuta especializado en oncología puede realizar una intervención en muchas fases. “Desde antes del diagnóstico, en la fase de prevención, antes de los tratamientos, prehabilitación, durante los tratamientos, en el periodo libre de enfermedad y en las posibles recaídas”, advierte Rocha.

Profesorado especializado de referencia

Por ese motivo, el posgrado pretende dotar al alumno de un profundo conocimiento sobre las características, cuidados y necesidades del paciente oncológico. Y de las herramientas de valoración y tratamiento más actuales, con el objetivo de mejorar la calidad de vida del paciente oncológico. En este sentido, incluye las bases de la oncología y de los tratamientos del cáncer, el abordaje de las alteraciones desde la fisioterapia y la metodología de la investigación.

Y se apoya en un claustro de profesores referentes en el ámbito oncológico. Entre otros, Alberto Jacobo Cunquero Tomás, Oncólogo Médico en el Servicio de Oncología Médica del Hospital General de Requena y en el Hospital General Universitario de Valencia. También, María Rodríguez, especialista en Oncología Radioterápica del Hospital La Fe de Valencia. Pilar Serrano Paz, Jefa de la Unidad de Coloproctología de los Hospitales Universitarios de Torrevieja y de Vinalopó. O Ana Serrano Sanz, experta en Fisioterapia Oncológica y Linfedema y presidenta de la Comisión de Fisioterapia Oncológica y de Cuidados Paliativos del CPFCM.

Este posgrado se suma a la oferta formativa que el CEU de Elche viene desarrollando desde hace unos años en el grado de Fisioterapia. Así, los egresados pueden optar por una especialización en el tratamiento del dolor desde la fisioterapia invasiva. Pero también especializarse en el tratamiento de las disfunciones del suelo pélvico, que se han visto incrementadas por la pandemia del COVID.

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