Información: Diego Estellés / Imágenes: Patricia Puchades y Maxi Martínez
El ciclo ‘Dies Academicus: Pensar la Universidad Hoy’ ha contado con la presencia del Investigador Ramón y Cajal de la Universidad CEU Cardenal Herrera, Ángel Gómez Martín, cuya trayectoria docente y profesional ha estado especializada en el “sector de los pequeños rumiantes”. La segunda conferencia de este curso 2025/2026 ha centrado su la reflexión en la transferencia de la investigación, la cual Gómez Martín la considera “un deber universitario y una oportunidad de proyección”.
El investigador de la CEU UCH ha resaltado durante su intervención siete puntos que son las conclusiones sobre las que se conforma la jornada y que quiere transmitir. La primera de ellas es conocer el sector al que se busca transferir investigación. Por ejemplo, en el caso del sector de los pequeños rumiantes está “totalmente tecnificado” y España actúa como potencia en ovino y caprino a nivel mundial en exportación genética. Por lo tanto, el conocer sus características “permitirá conocer los problemas que hay que solucionar” y cómo enfocar la investigación.
Gómez ha destacado la necesidad de buscar el impacto social, sobre todo cuando se tiene financiación pública. En su caso, ha señalado la investigación sobre la Agalaxia contagiosa que es la enfermedad con “mayor impacto socioeconómico ovino y caprino mundial” y que, además, afecta a la salud pública. «Es la enfermedad a la que todo ganadero de ovejas y cabras teme, porque es la que arruina a familias enteras”, pero gracias a los esfuerzos de su equipo han descubierto herramientas para luchar contra ella.
Durante su intervención ha resaltado también la necesidad de buscar el impacto económico, ya que esto podría mejorar el sector y la situación de muchas personas. Gómez ha recordado cómo una de sus investigaciones no solo ha ayudado a empresas, sino que también ha ayudado a personas. Además, ha señalado que “las patentes son la antítesis de la transferencia”, pues en algunos casos son difíciles de conseguir. “Las cátedras, los contratos, las patentes, al final es una forma que te proyecta en la financiación pública y lo que para mí es más importante”, ha aseverado.
Respecto a los contratos de I+D+I, el profesor de la CEU UCH ha indicado que los grupos que se dedican a sanidad animal, salud pública, “tienen una gran responsabilidad con la sociedad y con este mundo” y ha señalado que estos contratos “pueden proyectar internacionalmente muchísimo”. Además, el objetivo tres de investigación habla justamente de facilitar la transferencia del conocimiento y tecnología, impulsando colaboraciones con empresas e instituciones.
A continuación, ha explicado la transferencia que se da a normativas y administración en cuanto a asesoría científica. Para ilustrar esto ha comentado cómo tras las conclusiones de su tesis doctoral algunas fueron introducidas en normativas que no existían aún. Tras esto fueron tenidos en cuenta para asesorar y dar cátedras en toda la Comunitat Valenciana, como es el caso del Proyecto Nacional de la Agalaxia, “al final pues es prestigio, reconocimiento y confianza en nosotros”.
Para finalizar, ha valorado que “no hay que olvidar la transferencia a los estudiantes” y que es “una de las cosas más bonitas que uno puede hacer en ciencia”. “No solo hay que llevarlos a muestreos, hay que implicarlos” y darles “lo que esta generación quiere, experiencias”, señala. Gómez Martín ha acabado con una reflexión “investigación y ciencia al más alto nivel sí, pero a cualquier precio no”, pues debe de haber responsabilidad civil, “si puedes evitar que muera alguien o que una familia se arruine pues a lo mejor hay que tragarse el ego”.





