Información e imágenes: Gonzalo Escrig
La exministra de Cultura, expresidenta del Senado y de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha protagonizado este miércoles una conferencia en el paraninfo de la Universidad CEU Cardenal Herrera, con motivo de la presentación del Plan de Excelencia 2025-2026. El acto, moderado por el director de Comunicación Corporativa, Elías Durán de Porras, ha congregado a estudiantes de diferentes titulaciones y se convirtió en un repaso de la trayectoria política de Aguirre y de su visión sobre la educación en España.
Aguirre ha centrado gran parte de su intervención en criticar lo que considera un deterioro del sistema educativo. “La tesis de los socialistas en educación es el igualitarismo y, para igualar a todos, lo que hacen es bajar el listón”, ha señalado, antes de advertir que “la excelencia está a punto de ser prohibida, si pudieran, la prohibirían”. La exministra ha defendido que la excelencia requiere esfuerzo y constancia, y lo ha ejemplificado con el tenista murciano: “En el deporte y en la formación académica hay que trabajar con regularidad. Carlos Alcaraz dedica cuatro horas diarias al gimnasio, más los entrenamientos, y eso también es excelencia”.
“los ciudadanos tienen derecho a elegir el colegio de sus hijos, el médico, el hospital o el horario en el que compran»
La dirigente ha recordado la creación en Madrid del Instituto San Mateo, un centro de excelencia que exige una nota media de 9 en secundaria, y ha subrayado: “recibí grandes críticas en la Asamblea de Madrid, pero quince años después estoy muy satisfecha de haberlo impulsado porque la excelencia requiere esfuerzo, constancia y profesores capaces de transmitir ese espíritu”.
El valor de las humanidades
Aguirre también ha dedicado parte de su ponencia a las humanidades, al considerar que “los países que no conocen su historia están condenados a repetirla”. Asimismo, ha recordado que en 1996, como ministra de Educación, impulsó un plan de estudios elaborado por la Fundación Ortega y Gasset con catedráticos de distintas disciplinas, aunque finalmente lo retiró por presiones políticas. “Ese fue el gran error de mi vida política”, ha reconocido, antes de criticar que todavía hoy la enseñanza de la historia en secundaria empiece en el siglo XIX, porque “se considera que si los alumnos estudian los siglos XVI y XVII pueden hacerse conservadores”.
Además, la exministra ha reivindicado su ideario liberal al señalar que “los ciudadanos tienen derecho a elegir el colegio de sus hijos, el médico, el hospital o el horario en el que compran, y esa libertad ha demostrado que no destruye comercio, sino que lo multiplica”. También ha aconsejado a los jóvenes con vocación política que primero alcancen independencia profesional, porque “antes de dedicarse a la política hay que ser independiente económicamente; solo así se puede defender lo que uno cree sin depender de un jefe”.
En su repaso ideológico, Aguirre ha recordado sus inicios en la política: “Yo soy liberal, lo he sido siempre. Empecé en un partido muy pequeño, la Unión Liberal, del que se decía que cabíamos todos en un taxi, pero que además lo pagaba Alianza Popular”. Y ha reivindicado su trayectoria vinculada al liberalismo aludiendo a su maestro Pedro Schwartz y al libro Free to Choose de Milton Friedman: “Creo que los ciudadanos deben poder elegir: el colegio de sus hijos, el médico, el hospital o el horario en el que compran. Esa libertad ha demostrado que no destruye comercio, sino que lo multiplica”.
Consejos a los estudiantes
Aguirre ha animado a los universitarios a no conformarse con un título. “Toda la vida es aprendizaje. No basta con acabar la carrera; hay que seguir formándose con constancia y sin desmoralizarse”, ha señalado. Preguntada sobre el reconocimiento de la excelencia, ha afirmado que “no puede buscarse solo para recibir elogios externos, porque lo esencial es la formación académica y personal; el reconocimiento, si llega, será por añadidura”.
“la Constitución reconoce el derecho de los padres a elegir el tipo de educación que desean para sus hijos, incluida la religión”
Asimismo, ha aconsejado a quienes aspiran a entrar en política que lo hagan desde la independencia: “Antes de dedicarse a la política hay que ser económicamente independiente. Solo así se puede estar en política sin tener que aceptar lo que diga un jefe para no perder el sueldo”. En cuanto a los valores que deben guiar a los profesionales, Aguirre ha sido clara: “Uno no puede moverse únicamente por intereses, sino por principios como la defensa de la propiedad, de la vida, de la libertad, de la ley y de la unidad de España”.
Críticas a las leyes educativas
La dirigente política también ha reflexionado sobre la enseñanza religiosa y ha defendido: “la Constitución reconoce el derecho de los padres a elegir el tipo de educación que desean para sus hijos, incluida la religión”. Además, ha sido muy crítica con la sucesión de reformas educativas: “En España nunca hemos tenido una ley de educación de verdad; cada vez que se hacía una, se derogaba. Hoy rigen leyes igualitaristas y socialistas que incluso permiten pasar de curso aunque se suspenda”.





