Información e imágenes de Marc Grancha y Mario Baquero
El director del cortometraje ‘Amianto’, proyectado en la jornada inaugural de la 35ª Edición del Festival Cinema Jove de Valencia, Javier Marco ha recibido a ‘El Rotativo’ este domingo en la cafetería de la cadena de hoteles Vincci de Valencia. Un encuentro en el que nos ha contado -de primera mano- cómo ha sido producir el filme que tantas alegrías y premios le está dando en la actualidad.
Javier cuando estabas comenzando a materializar el filme, ¿pensabas que llegaría tan lejos? ¿Cómo estás viviendo el furor que está causando ‘Amianto’ en festivales audiovisuales como Cinema Jove, el festival de Villa de Coslada o el premio recibido por parte de Movistar+?
Antes que nada, quiero agradecer a Cinema Jove y a Movistar+ poder comenzar a realizar ‘Amianto’ ya que, antes de que llegaran estos galardones, nosotros solo teníamos el guión y pensamos que, si nos los daban, podríamos comenzar a producirlo lo más pronto posible, pero si no era así, ‘Amianto’ hubiese tenido que esperar para llegar a verse reflejado en la gran pantalla. Por suerte, lo hemos podido sacar hacia adelante cuanto antes y en cuanto nos dieron el premio, nos pusimos manos a la obra. A parte de agradecer la aportación económica que recibimos por parte de Movistar+, también quiero mandar un saludo a Pecera Studio, ya que, con el galardón también se nos premiaba con la producción gratuita del sonido de todo el corto, de la cual se encargó David Rodríguez que, para mí, es uno de los mejores en cuanto a sonido se refiere. David estuvo trabajando bastante duro porque a la vez que iba haciendo todo el retoque del sonido de nuestro filme, también estaba metido en el proyecto de Álex de la Iglesia ‘30 Monedas’ que vio la luz hace poco, por lo que es justo reconocer el trabajo que hizo con nosotros. Por otra parte, agradecer también al certamen Villa de Coslada porque nos permitió tener un empujoncito más para poderlo llevar todo a cabo y muchas de las escenas nos las dejaron rodar en la propia Coslada sin necesidad de pedir permisos ni nada porque todo lo consiguieron ellos y además nos ayudaron un montón desde el ayuntamiento de la Villa, cosa de la que estoy muy agradecido. Finalmente, esto y ya fue la guinda del pastel, es que también solicitamos varias ayudas al Ayuntamiento de Madrid y nos las concedieron, así que lo único que puedo decir es que salió todo a pedir de boca y, la verdades d que la suerte estuvo de nuestra parte.
Después de haber tenido todo este reconocimiento en nuestro país, ¿tenéis pensado subir el último escalón e impulsarlo hacia el ámbito internacional?
Sí. El objetivo es proyectarlo en otras partes de Europa, pero la idea principal era estrenarlo aquí en España, ya que, como tuvimos el reconocimiento de Movistar+, no podía ser de otra forma, y qué mejor sitio para proyectarlo por primera vez aquí en el Cinema Jove. A partir de aquí vamos a intentar abrirnos la puerta hacia otros festivales, aparte de llevarlo a la internacionalización, como el de Málaga, el de Medina del Campo o el festival ‘Madrid en Corto’, este último se encargaría de la distribución del mismo.
Siguiendo en la línea de lo anterior, uno de tus cortos anteriores ‘A la Cara’ ha sido nominado para los Goya, ¿qué expectativas tienes sobre este corto? ¿Esperas que te den el galardón?
Todavía no ha sido nominado, se encuentra en la última fase del proceso de selección compitiendo con otros quince cortos más en la sección de cortometrajes de ficción, y ya después de esta fase, el 11 de enero seleccionarán a los cinco nominados que irán a la Gala de los Goya 2021. No te voy a mentir, pero veo complicado estar entre los cinco primeros, aunque me satisface poder estar entre los candidatos, independientemente de si luego me nominan o no. Algo que creo que nos podría dar un poco de impulso para entrar finalmente en la gala, es la nominación que tenemos en los Premios Forqué a los que iremos el 16 de enero, a ver si nos sirve como precedente para llegar a los Goya. Para mí todo esto me resulta curioso porque siempre son premios que los hemos visto por la televisión, y todavía no he estado ni en los Forqué ni en los Goya, así que a ver si tenemos suerte y conseguimos llegar al teatro Soho en Málaga el 6 de marzo.
Cuéntanos un poco como ha sido el proceso de producción en las circunstancias en las que nos encontramos ahora mismo: ¿Cuánto tiempo habéis tardado en realizar todo el proceso de pre-producción, producción y post-producción?
Ha sido una carrera a contrarreloj en la que en menos de dos meses hemos conseguido sacarlo todo a la luz y de una manera muy satisfactoria. Íbamos a empezar a grabarlo a finales de marzo, pero nos pilló el Covid y tuvimos que paralizarlo hasta finales de octubre, aunque bueno, se paralizó la humanidad entera… Es cierto que por la pandemia tuvimos que destinar parte del presupuesto para poder realizar las PCR a todo el equipo, y al final también esto ha cambiado la manera en la que se hacían los rodajes. Por ejemplo, yo cuando un actor acaba una escena y lo ha hecho bien me gusta acercarme, darle un abrazo, pero claro, con esto de la COVID-19 hemos tenido que adaptarnos a la ‘nueva normalidad’. Nuestro miedo era el contagio y por eso estuvimos pendientes de que todas las medidas se respetasen al 100%. Por suerte, no hubo ningún contagio durante el rodaje.
Podrías contarnos ¿de dónde nace la idea de hacer ‘Amianto’? ¿Y por qué decidisteis ponerle ese nombre?
El guión de ‘Amianto’ es de Belén Sánchez Arévalo que, aparte de ser mi pareja, también es quien se encarga siempre de plasmar sobre el papel la idea que tengo en mi cabeza. La historia de hacer este cortometraje nace de una noticia que decía que se habían encontrado el traje de Espinete en un vertedero lleno de amianto… Ese fue el germen de la trama y de donde sacamos toda la chicha para materializar la idea. Luego la adaptamos y la llevamos al terreno del desamor, relacionando el personaje del erizo con la pareja de adultos, de manera que, lo que pretendemos mostrar es el problema de comunicación que existe hoy en día en la vida de muchos matrimonios. Y tú dirás ¿qué papel juega el amianto en todo esto? Pues lo que hemos querido es plasmar esa metáfora de que el amianto se mete en las fibras del disfraz del erizo y se lo come, al igual que está pasando con el matrimonio que se va rompiendo poco a poco.
Si tuvieses que definir el corto con una palabra, ¿cuál sería?
Más que una palabra te diría que se podría definir como un cortometraje “de sensaciones”. Bajo mi punto de vista este ha sido el corto más experimental que he realizado a lo largo de mi trayectoria. Es un filme en el que no se explica todo meticulosamente y lo bonito o que al menos me emociona es que el espectador pueda interpretar -como él o ella quiera- lo que va pasando durante la historia, puesto que a lo largo de la producción van pasando muchas cosas que no quedan claras… Yo creo que ahí está la verdadera esencia de ‘Amianto’ que cada uno pueda hacer su propia lectura del corto.
Finalmente, ¿de dónde te viene a toda esta pasión por los cortometrajes o el cine en general? ¿Hacia dónde tienes puesto el foco ahora mismo?
Yo soy de Alicante y estudié ingeniería de telecomunicación porque, en su momento, todavía no estaba el Grado de Comunicación Audiovisual. Estudié lo que más se parecía y eso era ingeniería en telecomunicación. Al acabar la carrera me mudé a Madrid, donde empecé a descubrir el mundo audiovisual y me di cuenta de que era otro mundo. Ahí fue cuando comencé mi andadura en el mundo del cine. Ahora mismo tengo varios proyectos que están ‘a puntito de caramelo’ para el salto a la gran pantalla. Uno de ellos es el largometraje ‘Josefina’ que se estrenará en 2021, y el otro es un largometraje del que todavía no te puedo desvelar nada, pero te puedo avanzar que seré su director con lo que sería el primer largometraje dirigido por mí. Esperemos que podamos seguir llevándolo todo a buen puerto y que obtengamos buenos resultados con todo lo que queda por venir.
