«Mamá quiero ser bloguera»

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Sara Domenech / 4º Periodismo

Cada año, son más los blogs que optan por hablar de tendencias, y consiguen gran expectación por parte de todos los amantes de la moda, ello supone un problema para la prensa glamourosa que intenta retener a sus fieles compradores, adaptándose así a la mayor fiebre que ha vivido éste sector en mucho tiempo, la red.

“En cierto modo, los blogs, enriquecen a la prensa de moda, enseñando outfits en chicas más normales que modelos o actrices que suelen salir. Pero por otra parte pone más difícil a las revistas de moda vender, teniendo en cuenta la cantidad de blogs que hay hoy en día se compran menos revistas.” Así de claro nos habla Marina Scofield, ella se dedicaba a diseñar vestidos para sus muñecas, y con tan solo 15 años se lanzó a esta plataforma tan grande de los blogs, arriesgó y comenzó a subir a la red todo los conjuntos que le hacían sentir segura y que como ella dice le hace ser más ella “me permite mostrar mi personalidad, mis gustos y mis ganas de arriesgar.

Aunque ella afirma dedicar todo el tiempo que puede a su blog, ‘Cocacolaenlasvenas’, asegura que bajo su punto de vista la aparición de las bloggers de moda ha afectado a la prensa. «Sí.  Adoro leer blogs, pero no tiene comparación a tener una revista redactada por personas que se dedican a ello, ver cosas más arriesgadas, distintas, artículos… y sobre todo tenerlo de modo «físico» y poder echar mano de ello pasados los meses», señala. Marta Handrich, periodista de moda, habla segura respecto al futuro de ambos modelos de expresar tendencia “los blogs de moda suponen una competencia para las revistas impresas porque el usuario puede acceder a los blogs de forma gratuita desde casa, creo que por esta razón cada vez son más las revistas que se suman a la ‘fiebre blogger’ y cuentan en sus ediciones virtuales con blogueras o celebrities que cuentan sus secretos de belleza y muestran sus prendas de ropa. En mi opinión a las revistas escritas les quedan dos telediarios, el futuro está en la red”.

Vogue, Glamour, Cosmopolitan, Elle, son algunos de los nombres de revistas que ya se han sumado a esta innovación y que apuestan de manera diferente por la red, algunas como Vogue o Cosmopolitan contratan a actrices que pasan por su mejor momento, como Blanca Suárez o Úrsula Corberó, para que no solo hablen de tendencias sino que añadan pinceladas de su vida de forma que la revista pueda ganar en seguidores y esto le haga fidelizar compradores. Otras publicaciones como Glamour o Mujer hoy, apuestan por bloggeras que llevan un tiempo dedicándose a escribir posts semanales con fieles seguidores de su estilo.

Low Cost

Para la periodista Marta Handrich, lo que les hace triunfar a los blogs por encima de la prensa es que “sirven de impulso para que la moda asequible llegue al consumidor”, pues lo que les diferencia a muchas bloggers es que la ropa que utilizan en su vestuario semanal es económica, lo que hace que más gente pueda utilizarla e inspirarse en su estilo, eso es lo innovador. Marina Scolfield, es un claro ejemplo de ello pues, a pesar de recibir en varias ocasiones regalos de prendas para que las utilice en su blog, ella asegura: “Intento mostrar prendas asequibles, que aunque me regalen por colaboraciones tengas un precio apto para cualquier bolsillo. Creo que la moda no es una cuestión de precio, obviamente con un amplio presupuesto casi cualquiera puede vestir bien, el reto está en hacerlo con prendas más baratas.”

Constancia y originalidad es lo que le hizo falta a Marina, que asegura: “Los primeros meses son duros, puede que nadie o pocas personas te visiten pero hay que seguir publicando” . Marta Handrich, no tiene un blog de moda, sin embargo cada vez son más los seguidores que se decantan por su estilo y crea tendencia sin necesidad de crearse un blog . En el caso de Marina, todos aquellos que la siguen, son fieles en instagram, twitter y demás redes sociales que posee la blogger.

Tanto Marta como Marina, se declaran enamoradas de la moda, de la gente con estilo, y de aquellos que sin tener todo el dinero necesario para vestir como una celebritie consiguen que parezca que lo suyo es lo más innovador, bueno y de calidad, porque según apuntan ambas,  «la calidad está en el estilo, y no en el precio de las prendas».