Canito: “Como fui torero sabía el momento de disparar”

0
2464

Jaime Roch / Periodismo 1º

No hay vida más documentada en la historia del toreo que la de Francisco Cano Lorenza, alías “Canito”. Alicantino afincado en la capital del Turia es fotógrafo de fotógrafos, amigo de sus amigos, artista, profesional y maestro.

DSC_0317
Canito en su juventud con la cámara de fotos / Foto: Archivo

Pregunta. El Ministerio de Cultura le ha concedido el Premio Nacional de Tauromaquia, dotado de 30.000 euros. ¿Qué va hacer con el dinero?

Respuesta. Me han dado más de 200 premios pero quería que alguno fuera de dinero, y éste lo es. Me voy a gastar el dinero en comida y con los amigos, no se puede ahorrar nada, hay que moverlo, y más a mi edad.

P. Se ganó pronto la confianza y la amistad de Dominguín, Manolete, Juan Belmonte, entre otros.

R. Todo el toreo es amigo mío, también sabían que yo fui torero profesional. Había gente que me tenía envidia. Un día estábamos en el Hotel Palace, Manolete, su apoderado Camará y su primo hermano Cantinflas. Éste le preguntó al maestro cordobés: “Manolo, qué bien se está hablando poco” y el diestro respondió: “Mejor se está callado”. Y eso es lo mejor, estar callado, como dijo Manolete.

P. Cuénteme los mejores momentos de su vida…

R. Con Manolete he disfrutado mucho, las cacerías con Franco y Dominguín  también, porque Luis Miguel y yo éramos como hermanos. Y con los Bienvenida casi me he criado. También me divertí con Orson Welles, las noches con Hemingway en Pamplona las recuerdo mucho y, sobre todo, con mi querida Ava Gardner me lo he pasado en grande.

P. El mejor momento con Manolete…

R.  Con el maestro cordobés he pasado momentos muy buenos. Ha sido el torero que más me ha impactado, con el que más he sufrido y el que más me ha hecho disfrutar. Ha sido una barbaridad. No habrá otro igual, siempre le recordaré.

P. Y de Belmonte qué me dice…

R. Fue una personalidad y su toreo una revolución. Me acuerdo que le hice una fotografía en un festival orinando y las máquinas de aquellos tiempos hacían un ruido raro y el ‘Pasmo de Triana’ se me quedó mirando y me dijó: “Cano, ¿también meando?” Y le contesté: “Hasta meando tiene usted arte don Juan”. Y empezó a reírse.

P. Con qué torero se queda, ¿con Belmonte o Manolete?

R. Solo vi dos veces torear a Juan pero no se pueden comparar esos dos figurones porque son dos épocas distintas. Belmonte fue el padre de la Tauromaquia actual y trajo el toreo de cercanías. Pero el que más se ha arrimado aquí ha sido Manolete.

P. ¿Después de Manolete está Carlos Arruza?

R. Sí, o Pepe Luis Vázquez y después Luis Miguel. Para mí todo el que se vista de torero tiene su mérito porque yo sé lo que es ponerse delante de un toro. Manolete, Pepe Luis Vázquez y Domingo Ortega o Luis Miguel Dominguín constituyen mi cartel preferido.

P. ¿A quién le ha llorado más a Manolete o a Montoliu?

R. A Manolete. Montoliu era amigo mío porque fue alumno de Paco Honrubia, banderillero de Valencia que hacía la suerte como pocos. Aquella fatídica tarde del 1 de mayo de 1992 le pregunté al jefe de sombra que cómo estaba el hombre y me dijo que había muerto. Iba a empezar a llorar y me dijo que parase porque la gente no lo sabía. Fue una gran persona y un gran banderillero.

P. ¿La imagen de la cuadrilla de Manolete llevándolo a la enfermería le hizo rico?

R. Gane un dinero pero no me hice rico.

DSC_0313
Manolete tras la cogida. / Foto: Canito

P. Dicen que usted es el mejor fotógrafo taurino…

R. Eso dicen, yo no digo nada. A la gente le sorprendían mis fotos, por buenas.

P. Usted nació en plena época dorada del toreo. De todos los conceptos que ha visto, de todos los toreros que ha fotografiado, ¿con cuál se queda?

R. Con Manolete. Se arrimaba lo mismo en Foios, que en Madrid o Sevilla. Los compañeros le decían que no se arrimara tanto a lo que él contestaba que pagaban lo mismo en todos los sitios.

P. Fotográfo y torero. ¿Usted cómo se definiría como torero?

R. Era muy valiente, de “bragueta”. De arte también andaba bien. La gente me admiraba. A mí me hubiese gustado llegar lejos como torero. Como bien saben quienes me conocen también fui profesor de natación y boxeador, todo un deportista.

P. Aunando los dos conceptos, fotógrafo taurino y torero, ¿qué hay que hacer para conseguir una buena instantánea?

R. Conocer el toreo y apretar en el momento justo. Ahora haces diez fotos y escoges la mejor, antes, tenía que apuntar y disparar en el momento adecuado. Por eso, como fui torero, sabía el momento justo para disparar. Creo que eso ha sido fundamental para poder captar las mejores  imágenes. Sólo así, sabiendo del arte, es posible.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí