Las víctimas del terrorismo no creen que el final de ETA esté más cerca que antes de la presentación de Sortu
Rosana Belenguer – 5º PeriodismoUna vez más, Batasuna protagoniza el debate político y social. La nueva formación Sortu, presentada el pasado 8 de febrero, no ha sorprendido a las numerosas víctimas del terrorismo en España, quienes opinan que se trata de una estrategia más que utiliza la plataforma para estar presente en las instituciones cuando se acercan las elecciones municipales.
“Seguimos pensando que este partido es una burla; no es suficiente que condene la violencia en sus estatutos porque lleva 20 años engañándonos con lo mismo. Sólo hacía falta ver a los que presentaron el partido; son los mismos integrantes de Batasuna”, afirma el vicepresidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) José Marco.
Por este motivo, no se muestra conforme con la corriente que anuncia el fin de la banda terrorista a raíz del nuevo partido ya que cree que este final estaba “igual de cerca” antes de que intentaran presentarse a las elecciones. “No nos sirve hacer algo para que ellos se reconviertan en demócratas porque son delincuentes. Lo importante son los hechos y, hasta ahora, ETA no ha entregado las armas ni ha colaborado con la Justicia ni la Policía”, indica Marco.
Aunque estas reacciones desde los colectivos de víctimas han sido unánimes desde el mismo día en que se presentó Batasuna-Sortu, muchas asociaciones ya se habían adelantado a los acontecimientos, sobre todo después de la tregua anunciada en enero por la banda terrorista. Entre ellas se encuentra Voces Contra el Terrorismo, con Francisco José Alcaraz a la cabeza, quien en la manifestación organizada el día 5 de febrero en Madrid ya previó la presentación de un nuevo intento de ETA para presentarse a las municipales.
“Lo que me preocupa no es sólo el objetivo de llegar por cualquier vía a las instituciones, sino que el gobierno haga un esfuerzo más allá del propio paso de la organización terrorista”, explica Alcaraz. Por ello, pronostica que va a ser un año “duro” para las víctimas, en el que se producirán “acercamientos y excarcelaciones” que les harán “mucho daño”.
Pese a todo, asegura que los afectados por el terrorismo trabajarán “hasta que ETA esté derrotada”, y que un ejemplo de ello fue la manifestación. “Lanzamos un mensaje alto y claro, y es que no estamos dispuestos a aceptar ningún tipo de negociación”, señala Alcaraz.
Fin del pacto en el País Vasco
Otro de los colectivos que estuvo presente en las calles de Madrid y demandó esto mismo fue la Fundación para la Defensa de la Nación Española (DENAES). Para su presidente, Santiago Abascal, Batasuna-Sortu “se ha dedicado a maquillar unos estatutos, porque en realidad sigue siendo el brazo político de una banda criminal”. Por este motivo, considera que las pruebas “son suficientes para su ilegalización”, y que el conjunto de los españoles “no puede creer en una conversión a la democracia con respeto a los derechos humanos, porque sus nuevos principios no cambian nada”.
Para Abascal, cuya desconfianza e inquietud “es total”, una de las cosas que peligraría con la legalización del nuevo partido sería el pacto PP-PSOE en el País Vasco: “ETA entrará en el ayuntamiento y la mayoría constitucionalista será imposible porque la tendrán los nacionalistas. Por lo tanto, aunque el PP mantuviera el apoyo, finalmente terminaría el pacto”.