“Educar para afrontar la adversidad: Pedagogía Hospitalaria y las escuelas sin Escuela” ha sido el punto de partida de la charla que Ana Artázcoz, Orientadora del Departamento de Educación del Gobierno de Navarra y Coordinadora del Servicio de Atención Educativa Domiciliaria de la Comunidad Foral, ha impartido a los estudiantes de los Grados en Magisterio, Fisioterapia y Enfermería de la Universidad CEU Cardenal Herrera en Elche.
En la jornada se ha puesto de manifiesto la importancia del derecho a la Educación de los niños enfermos, incidiendo en que la atención educativa dentro de los hospitales y la atención domiciliaria son dos herramientas al servicio de los menores cuyas enfermedades les impiden la asistencia al colegio. En este sentido, se han ofrecido las claves educativas sobre cómo educar la resiliencia, que es la capacidad para afrontar dificultades y resurgir fortalecido. “Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que la afrontes”, ha asegurado Ana Artázcoz.
En su ponencia, Merece la pena: educar para afrontar la adversidad, Artázcoz ha insistido en que “cuando un niño enfermo de cáncer sonríe permanentemente y en cambio un adolescente sano, deportista, guapo está ‘apagado, triste, sin brillo’, te preguntas qué está pasando en nuestra sociedad”. Esta situación obliga, según esta experta, a conocer la diferencia entre dolor y sufrimiento “y ser conscientes de que los seres humanos tenemos la capacidad de reponerlos a las adversidades”. Desde el punto de vista de la formación de los menores, “los educadores debemos centrar nuestros esfuerzos en preparar para el camino a nuestros alumnos, no prepararles el camino”, ha concluido Artázcoz.