• La Jornada reunió en el Palacio de Colomina CEU de Valencia a profesionales que trabajan con menores en el ámbito de la psicología, el derecho y la educación
  • El encuentro abordó los riesgos y oportunidades del entorno digital, así como la responsabilidad compartida en la protección de menores

Profesionales de ámbitos educativos, clínicos, legales y sociales se reunieron en la Jornada “Exposición a las redes sociales en la Infancia y la Adolescencia”, organizada por el Máster Universitario en Psicología Jurídica y Práctica Forense de la Universidad CEU Cardenal Herrera (CEU UCH) de Valencia. El encuentro permitió reflexionar sobre la relación entre el entorno digital y el desarrollo emocional de los adolescentes, los procesos que guían su conducta y madurez, así como la responsabilidad y el acompañamiento familiar y social.

Educar con el ejemplo

“Educar en la era digital consiste en aprender a mirar de otra manera”. Con esta idea inició su intervención Óscar Cortijo, psicólogo y director de Personas de la CEU UCH, en la inauguración de la Jornada. Cortijo subrayó el papel de los adultos en el acompañamiento a los menores para minimizar los riesgos de la exposición a pantallas y redes sociales. Destacó que estas plataformas son también espacios de creatividad y encuentro: “el desafío está en enseñar a habitar en ese espacio”.

Frente a los riesgos, defendió la necesidad de adultos “presentes”, porque “el ejemplo sigue siendo la forma más poderosa de educación”.

El acto inaugural de la Jornada contó también con la participación del vicerrector de Ordenación Académica, Digitalización y Calidad, Juan Manuel Corpa, y la coordinadora del Máster, Mar Lluch.

“Es más efectivo educar que legislar”

Roberto Fernández Bailón, oficial de la Policía Nacional y profesor del Máster CEU, ofreció la conferencia “Menores en la red”, en la que analizó riesgos, delitos frecuentes y fórmulas de protección. Para el experto, la clave está en educar, concienciar y acompañar a los menores para un uso adecuado de pantallas y redes sociales.

La conferencia de Fernández Bailón concluyó con un debate entre los asistentes sobre la necesidad de crear “salas amables” para atender a menores víctimas y garantizar que estén acompañados por un letrado especializado desde el inicio del proceso de denuncia.

Adolescentes y madurez

Coral Ariño, psicóloga acreditada en psicología forense y neuropsicología clínica, abordó el concepto de madurez en la adolescencia y su complejidad en la valoración psicológica de menores infractores. Explicó la importancia de analizar cuatro dimensiones: cognitiva, emocional, moral y social, claves para determinar la intencionalidad delictiva.

Ariño señaló que el modelo educativo y la sobreprotección familiar favorecen un retraso en la madurez, lo que deriva en adolescentes menos responsables, pero con mayor acceso a la tecnología.

Comprender la insensibilidad del menor infractor

Gemma Climent, psicóloga del Instituto Vasco de Medicina Legal, centró su intervención en los rasgos CU, presentes en adolescentes con trastorno de conducta. Señaló que se trata de una desviación del desarrollo no ligada a la madurez, sino a la falta de empatía, a la insensibilidad emocional.

Climent destacó la influencia tanto genética como ambiental en estas conductas y defendió la necesidad de diagnósticos claros para diseñar intervenciones específicas: “Detectar no es condenar, es intervenir mejor”.

Junto a Coral Ariño, presentó la Asociación Nacional de Neuropsicología Forense (ANFO), que reúne a profesionales de la neuropsicología, la neuropsicología forense y la neuropsicología clínica para ofrecer un enfoque interdisciplinario a los retos y necesidades del campo.

El valor de la colaboración interdisciplinar

En la clausura de la Jornada, el director del Departamento de Ciencias Jurídicas de la CEU UCH, Javier García González, insistió en enseñar a los menores a tomar decisiones sin sobreproteger: “Cuando la ley actúa, hemos llegado tarde”.

Por su parte, Carmen Puerto, responsable del Palacio de Colomina CEU, subrayó que “solo desde la colaboración interdisciplinar” se pueden afrontar los desafíos que plantea esta realidad, como han demostrado las ponencias procedentes de ámbitos tan diversos como la seguridad, la psicología, la neurociencia y la práctica forense.

Finalmente, la coordinadora del Máster Universitario en Psicología Jurídica y Práctica Forense, Mar Lluch, destacó la responsabilidad social en proporcionar herramientas para proteger a niños y adolescentes ante los nuevos retos de la red.

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