- El catedrático de Química Orgánica de la Universidad CEU San Pablo ha participado en el ciclo de conferencias “Pensar la Universidad hoy”, impulsado desde el rectorado de la Universidad CEU Cardenal Herrera
- Pérez Castells ha propuesto para la Universidad un primer curso “transformador”, un curso transversal que represente el inicio de esta nueva etapa formativa
“La Universidad en tensión” ha sido el título escogido por Javier Pérez Castells para la conferencia que ha ofrecido en el ciclo “Pensar la Universidad Hoy” de la Universidad CEU Cardenal Herrera. El catedrático de Química Orgánica de la Universidad CEU San Pablo ha realizado un diagnóstico personal sobre la situación de la universidad en España y los diferentes retos a los que se enfrenta.
En su intervención, ha señalado los desafíos o “tensiones” a los que debe hacer frente la universidad: desde la fragmentación, la importancia de conjugar docencia e investigación, la necesidad de incluir los valores, hasta la urgencia de conocer el sentido mismo de la institución.
Pérez Castells ha defendido que la universidad “es lugar de conversación entre diferentes personas”. Por encima de cualquier fragmentación, la labor de una universidad es “educar la mente”. Frente a la división entre docencia e investigación, ha defendido la necesidad de conjugar ambas porque la investigación desde la universidad también es docencia.
“La investigación es esencial en la universidad, es donde se forman los grupos, y en convivencia se trabaja y aprende”, ha destacado. Una investigación en la que participan profesores y estudiantes porque “no se puede ser un buen profesor universitario si no se hace investigación”.
El catedrático ha subrayado también la necesidad de defender valores como el respeto a la autoridad del maestro, la educación en el trato o la búsqueda de la verdad. Y en este sentido, ha destacado el valor de la Teología como disciplina clave.
La verdadera misión de la Universidad
“¿Qué es la universidad?” ha preguntado el ponente a los asistentes al ciclo. Para el científico es “Un lugar donde se abre una puerta”, donde se da la oportunidad de participar en diferentes actividades universitarias “que tienen valor por sí mismas”.
Para el catedrático se abre la oportunidad de diseñar una universidad que debe afrontar “tareas” pendientes, como arrinconar la burocracia, fomentar los grupos de investigación o priorizar la figura del maestro que dirige el estudio.
Una universidad para la que propone un primer curso “transformador”, un curso transversal que represente en forma y contenidos la ruptura con la educación obligatoria y el inicio de esta nueva etapa.
En esta hoja de ruta, el catedrático ha propuesto una Universidad con unos valores claros: promover una cosmovisión cristiana, conjugar ciencia, razón y fe, y avanzar en el eje de la modernidad, “reivindicando la escritura a mano o los exámenes orales y abiertos”. Respecto a los títulos universitarios, el catedrático ha apostado por ofrecer títulos amplios y clásicos, así como fomentar la formación posgrado.
“Encontremos la misión de nuestra Universidad”, ha subrayado, “podemos defender la verdad, ofrecer otra universidad. Tenemos el dinamismo necesario para llevarlo adelante”.
Hacia una Universidad generadora de ciencia y saber
La conferencia de Javier Pérez Castells “La Universidad en tensión” se ha cerrado con un diálogo entre los profesores asistentes, donde se ha abordado el objetivo de la institución universitaria desde diferentes perspectivas.
“La Universidad debe ser generadora de ciencia y saber” ha subrayado el rector de la CEU UCH en su intervención.
Higinio Marín ha clausurado esta sesión recordando el sentido del ciclo Pensar la Universidad hoy: “hacer comunidad universitaria, tener discusión, aporte de visiones distintas sobre qué es la universidad”. Y ha anunciado que el próximo curso académico, el ciclo de conferencias continuará con un nuevo enfoque: el estado de la universidad, de las ciencias y los saberes.
