La catedrática de Microbiología de la CEU UCH, María Teresa Pérez Gracia, imparte la Lección magistral del acto de apertura del curso 2021-22 sobre la “pandemia silenciosa” que constituyen las infecciones bacterianas multirresistentes
“La COVID-19 nos cogió por sorpresa; permitir que la resistencia de las bacterias a los antibióticos se convierta de facto en la segunda pandemia del siglo XXI dependerá de nosotros”. Así se ha referido la catedrática de Microbiología de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad CEU Cardenal Herrera, Teresa Pérez Gracia, a la resistencia bacteriana a los antibióticos, que ha calificado como a la “pandemia silenciosa”. A este tema ha dedicado la Lección magistral que ha pronunciado en el Solemne Acto de Apertura del curso académico 2021-22 en la CEU UCH, con ese revelador título: “La pandemia silenciosa: resistencia bacteriana a los antibióticos”.
Según ha alertado Teresa Pérez Gracia en la lección inaugural, “la crisis de los antibióticos se ha instalado de forma lenta y progresiva, casi inadvertida hasta convertirse en una grave amenaza para la salud pública mundial”. Por eso, afirma: “La resistencia a los antibióticos está siendo un tsunami silencioso contra los pilares de la medicina moderna; puede no parecer tan urgente como la pandemia de COVID-19, pero es igual de peligrosa”.
Una muerte cada tres segundos
Las cifras y evidencias aportadas en su intervención en el acto de apertura de la CEU UCH revelan inquietantes paralelismos entre las infecciones bacterianas resistentes a los antibióticos y la actual pandemia vírica de COVID-19. Según las previsiones de la OMS, en 2050 las cifras de mortalidad mundial anuales por bacterias multirresistentes serán equivalentes a las causadas por la COVID-19 en estos primeros 19 meses: causarán una muerte en el mundo cada tres segundos. Se estima que el número de muertes atribuibles a la resistencia a los antibióticos se acercará a los 10 millones de personas cada año; más que por accidentes de tráfico, diabetes e incluso más que por cáncer. Esta “pandemia silenciosa” es, para la catedrática de la CEU UCH, “es otro gran reto de salud global para la humanidad ante el que hay que actuar desde la investigación, en busca de nuevos antibióticos, y desde la concienciación sobre su uso adecuado por la población, para preservar su efectividad futura”.
La solución, en nuestras manos
En este sentido, Teresa Pérez Gracia ha destacado esta necesidad de actuar juntos: “La guerra contra las resistencias bacterianas aún no está perdida. La comunidad científica debe aprovechar las lecciones aprendidas con la COVID-19 para unir al mundo académico, la industria y los responsables políticos con el fin de preservar los beneficios que los antibióticos constituyen para la medicina moderna y que sigan así salvando millones de vidas”.
Según ha destacado, la resistencia a los antibióticos constituye un problema que trasciende el entorno clínico, dado que el ser humano, los animales y el medio ambiente son hábitats interconectados que pueden estimular la emergencia, evolución y propagación de las bacterias resistentes y genes de resistencia, lo que globaliza la situación y exige un enfoque “One Health”. El impacto negativo de esta “pandemia silenciosa” también se extiende mucho más allá de la salud, “con serias implicaciones en la reducción de la pobreza y la desigualdad, el bienestar animal, el medio ambiente, la alimentación y la seguridad”.
SWICEU: la aportación CEU UCH ante el reto
Además de describir las iniciativas internacionales y españolas puestas en marcha para abordar este reto de salud, Teresa Pérez Gracia se ha referido especialmente a la aportación de la CEU UCH a través del equipo SWICEU, surgido como proyecto CEU Innova de Aprendizaje-Servicio y que coordina desde el curso 2017-18. En él, ya más de cien universitarios han formado a más de 400 preuniversitarios en el método experimental de búsqueda de nuevos antibióticos, fomentando vocaciones científicas en busca de los “Fleming del futuro”. Y también, con la colaboración de la FECYT-Ministerio de Ciencia e Innovación, estudiantes de Salud y Comunicación del equipo SWICEU han desarrollado cada curso soportes de gamificación y campañas de concienciación sobre el buen uso de los antibióticos entre la población, fomentando la necesaria colaboración entre ambas disciplinas.
Ante la “pandemia silenciosa” de la resistencia bacteriana a los antibióticos, “debemos continuar la lucha y las dos medidas clave son la formación/concienciación y la investigación. De esta forma, quizás veamos el final del túnel”. Se trata, como ha apuntado Teresa Pérez Gracia en su lección magistral, de “un desafío tan complejo y ambicioso como necesario”.