• La ex presidenta de la Comunidad de Madrid y ex ministra de Cultura ofrece una reflexión personal fruto “del momento tan delicado que vive España”
  • «Para servir bien en política hay que ser libre y tener una salida profesional», ha defendido

Esperanza Aguirre presentó en el Palacio de Colomina de Valencia “Una liberal en política” (Deusto), una reflexión personal fruto “del momento tan delicado que vive España”. Acompañada por el rector honorario de la Universidad CEU Cardenal Herrera Vicente Navarro de Luján, la que fuera ministra de Cultura y presidenta de la Comunidad de Madrid no se dejó nada en el tintero cuando analizó la política española.

Aguirre explicó que lo importante del libro no es su “historia política”, a la que solo dedica un capítulo de su último libro. Sin embargo, destacó que siempre se había sentido libre porque tuvo claro desde el principio que debía labrarse un futuro profesional antes de embarcarse en política: “Se lo he dicho hoy a un grupo de alumnos Excelentes de la Universidad con los que me he reunido; para servir bien en política hay que ser libre y tener una salida profesional”.

En su opinión, este es uno de los males de la política española al que añadió la ausencia de “principios y valores”. “Esto es capital, porque solo si se tienen se pueden defender”, dijo en clara referencia al actual presidente del Gobierno.

Mis ideales estuvieron muy claros desde el principio: defensa de la vida, de la propiedad privada, de España y del imperio de la ley”

Aguirre no se dejó nada en el tintero durante su intervención y en el turno de preguntas. Criticó la Agenda 2030, el igualitarismo, lo woke  y el “alarmismo climático”. Con respecto a la riada de 2024, defendió la decisión del presidente Carlos Mazón de continuar al frente de la Generalitat para abordar la reconstrucción y aseguró que la situación hubiese sido otra si el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero no hubiese modificado el Plan Hidrológico Nacional, en 2004, que hubiese permitido construir la presa de Cheste.

Rodríguez Zapatero ocupó parte de la intervención de la ex presidenta de la Comunidad de Madrid. Según Aguirre, con ex presidente y secretario general socialista comenzó la “polarización, el odio a la derecha y el fin de la concordia de la Transición”. A estos efectos, recordó el audio de la entrevista de Iñaki Gabilondo y el Pacto del Tinell.

También el actual presidente del Gobierno fue objeto de sus reflexiones. Para Aguirre, Pedro Sánchez ha asumido como propio la estrategia de Rodríguez Zapatero para instaurar un “caudillismo wokista”, que definió como “el socialismo o comunismo del siglo XXI”, presente en la mayoría de los sectores educativos, medios de comunicación y centros de influencia ideológica.

La ex presidenta de Madrid animó a los presentes a “trabajar con pico y pala” y desde la democracia para hacer frente a esta corriente “desintegradora”. “Hay que hablar, discutir, estar en las redes y llevar nuestro mensaje en todo momento”, remarcó.

“Tenemos que ilusionar, no comprendo cómo no lo hacemos teniendo con nosotros dos principios tan buenos como la defensa de España y la defensa de la libertad”

La idea de España ocupó la parte final de su intervención. Citó al Charles de Gaulle para explicar que ser patriota no es ser nacionalista, pues el primero ama lo propio sin excluir lo ajeno mientras que lo segundo odia todo lo que no sea propio. Como patriota, entonces, recordó que durante su etapa como ministra de Educación y Cultura y como presidenta de la Comunidad de Madrid trabajó para que los españoles conocieran mejor su historia.

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