¿Enfermería escolar? ¡Ah! ¿Pero en los coles hay enfermeros/as escolares?, ¿sirven realmente para algo?

Éstas y otras preguntas similares son las que, probablemente, se están haciendo muchos de ustedes al leer estas líneas. Algunos, incluso, se las plantearon tiempo atrás, cuando escucharon hablar por primera vez de esta figura profesional.

‘Los enfermeros escolares son imprescindibles para la prevención y promoción de la salud’

Raquel Martínez Sánchez-Molina. Enfermera especialista en  Enfermería Escolar. Profesora de Enfermería en la Universidad CEU Cardenal Herrera de Castellón

Para aquellos lectores que, entonces o ahora, no tienen dudas respecto del papel clave que desempeñan estos profesionales de la salud en un colegio, ya les adelanto que están en lo cierto.

La enfermería es una profesión sanitaria que incluye multitud de funciones. Una de ellas es la prevención y promoción de la salud a través de una educación en hábitos saludables. Todos sabemos que, cuanto más pronto adquirimos hábitos, más fácil es mantenerlos. De ahí la idoneidad de interiorizar estos comportamientos saludables desde pequeños.

Partiendo de esta premisa, los profesionales de la enfermería escolar llevan muchos años luchando por integrarse en los colegios, con el objetivo de aportar a la sociedad una figura especialista en promover la salud desde la infancia.

¿De qué hábitos estamos hablando? Alimentación saludable, higiene corporal, higiene bucodental, ergonomía, primeros auxilios, prevención de hábitos tóxicos… son algunos de los programas educativos que los enfermeros escolares están poniendo en marcha en los colegios que cuentan con esta figura profesional en sus aulas.

También asistencia sanitaria

Además, por la propia profesión y su amplia formación sanitaria, los enfermeros escolares también realizan funciones asistenciales en los centros educativos, tanto una primera asistencia ante cualquier tipo de urgencia, como el seguimiento y control de tratamientos de salud y patologías crónicas de los niños en horario escolar, en colaboración con otros profesionales y unidades de salud. Una situación más frecuente de la que muchos de ustedes seguramente imaginan.

En ocasiones, los padres de los niños con los que trabajan en los colegios les han llamado “ángeles”. Ángeles que parece que caen del cielo para cuidar a los más pequeños… Pero no son ángeles, sino profesionales perfectamente formados en diferentes materias relacionadas con la salud infantil, que hacen su trabajo con la mayor profesionalidad posible, con el fin de orientar desde la infancia para formar “adultos saludables” en el futuro.

En suma, se trata de una figura imprescindible para la prevención y promoción de la salud. Lo son siempre, pero es inevitable pensar en la labor especialmente valiosa que habrían desempeñando estos profesionales en todos los centros escolares durante la pandemia…

Lamentablemente, hoy en día, tener acceso a un enfermero/a escolar es una gran suerte y no una gran realidad para todas las familias. Confiamos en que la demanda social, así como una reflexión en profundidad de nuestros representantes políticos, deriven en la inclusión de estos profesionales en los colegios con carácter general. Se trata de una más que rentable inversión en la salud presente y futura de la ciudadanía.

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