Viajar a Nueva York para representar a Vietnam en una conferencia de Naciones Unidas en la que intervienen 2.600 delegados de 136 países diferentes. Se trata de FWWMUN (Future We Want MUN), el único modelo de simulación de debate de Naciones Unidas que, afirma la organización, permite la participación igualitaria de jóvenes de todos los países. Una oportunidad inmejorable, que no han querido perderse los estudiantes que forman parte del Club MUN de la Universidad CEU Cardenal Herrera, para que los futuros líderes de todo el mundo aporten sus propuestas con vistas a alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Así, cuando el pasado mes octubre supieron que Nueva York albergaría en febrero esta cita mundial de referencia, Tomás Agustín Alassia (Derecho y Título Propio de Derecho Internacional y de la UE), Maite Bellido (Periodismo y Comunicación Audiovisual), Álvaro Bombal (Ciencias Políticas y Derecho), Joan Segura (Derecho y Título Propio de Derecho Internacional y de la UE), Tomiris Sugirbek (Audiovisual Communication and Publicity and Public Relations), Yaiza Vivo Espinoza (Derecho y Título Propio de Derecho Internacional y de la UE) y Claudia Zamora Ferrús (Derecho y ADE), decidieron empezar a recaudar fondos para vivir esta experiencia única.

“Los alumnos, y especialmente los más veteranos en este club, en lo que respecta a los Modelos de Naciones Unidas, teníamos el gusanillo de un proyecto más ambicioso, más complejo, que supusiera un auténtico desafío». Es decir: un reto como este «que, además, se realiza con mayor dificultad, en parejas, cuando siempre habíamos participado individualmente”, afirma Tomás. Y para prepararlo, destaca el estudiante del CEU, han tenido la ayuda de Alberto Ortí, entrenador del foro de debates del CEU del que también forman parte muchos de los miembros del club MUN: «Alberto nos entrenó para participar en el proyecto, llevando a cabo debates en inglés para coger experiencia y soltura en el lenguaje utilizado en este campo tan específico”, asegura. Y añade: «También tuvimos el apoyo del profesor de inglés Noel Fitzpatrick, que nos ayudó con los position papers».

Ya con la meta en la cabeza, y al tiempo que comenzaban a entrenarse para los debates, los alumnos del CEU decidieron emprender una campaña de recogida de fondos, con ayuda de su universidad, para financiar gran parte de los gastos. Lo lograron. Y, una vez allí, los “delegados de Vietnam”, aprovecharon al máximo su experiencia. Así lo cuentan.

“Es la conferencia más inclusiva y diversa que se realiza en Nueva York con delegados de más de 136 países. En el comité de Desarme, por ejemplo, éramos alrededor de 200 delegaciones”, explica Maite, que añade: “Aunque no éramos los únicos, es cierto que había muy pocos españoles”.

“La experiencia internacional ha sido muy enriquecedora, prosigue su compañero Joan. El poder conocer opiniones de jóvenes como nosotros, de todas partes del mundo, demuestra cómo, al fin y al cabo, estemos más cerca o más lejos, todos somos parecidos”.

Yaiza insiste en esta idea: “Lo verdaderamente enriquecedor de esta experiencia ha sido el poder mantener conversaciones fuera de las reuniones del Comité con toda la gente de distintas nacionalidades, compartiendo costumbres propias de cada uno, el día a día de un estudiante en los respectivos países, etc. Sin duda, hace que te entren ganas de viajar a cada uno de estos sitios y conocer por tu propia mano culturas diferentes”.

Pero no solo la experiencia internacional ha sido impagable. Los alumnos del CEU valoran mucho las destrezas y competencias que han reforzado gracias a su participación en este debate mundial. “A lo largo de las reuniones aprendes a estar en un ambiente formal, siguiendo un protocolo de conducta, perdiendo el miedo a hablar en público. Además, aprendes a negociar y te das cuenta de que cooperación y respeto entre todos es sinónimo de éxito”, subraya Claudia.

Y de eso va esta iniciativa, de lograr éxito en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Porque para eso, para mejorar la vida de las personas, debe ser la política, tal y como explica Álvaro: «El tipo de política en la que la gente no expone lo que realmente piensa y siente, deja de ser política, y pasa a ser la gestión de los intereses de los lobbies, no de las personas. Por ello, el mero hecho de argumentar implica que la política no es solo técnica, sino que hay una preocupación por toda la gente representada. Es vital saber escuchar, entender las posiciones de cada parte y poder fomentar un diálogo constructivo y fructífero”, asegura.

Autor: Future We Want MUN -Fwwmun 2019

Precisamente por eso, el MUN no estaba planteado para ganar. “Este tipo de debate no consiste en desacreditar la posición del otro y demostrar la superioridad o veracidad de la propia, sino en llegar a consensos (es un debate consensual), aunque sí había premios honoríficos y, en nuestro equipo, Yaiza y yo, que representamos a Vietnam en el comité de Salud, recibimos una mención honorífica”, destaca Tomiris.

Por su parte, Yaiza tiene claro que van a seguir involucrándose en este tipo de actividades. “Ya estamos preparando nuestra participación en debates nacionales. Además, continuaremos con nuestras reuniones semanales en las que llevamos a cabo simulaciones y nos enseñan diferentes técnicas y destrezas de oratoria”.

Autor: Future We Want MUN -Fwwmun 2019

Inspirado por la Resolución Rio + 20 de 2012, «El futuro que queremos», FWWMUN nació con el compromiso de promover una comunidad internacional unida, un futuro mejor y un mundo más sostenible a través del logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). FWWMUN ha identificado 10 objetivos de los 17 ODS como áreas de enfoque clave relacionadas con la juventud y la educación para guiar el trabajo de la organización.

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