Información: Carolina Sobieski / Imágenes: Paula Hernández
El Clec Fashion Festival no solo da espacio a diseñadores consagrados, sino que también abre sus pasarelas a jóvenes talentos que llegan cargados de propuestas rompedoras y frescas. Este año, los diseñadores emergentes mostraron una mirada audaz a la moda, con una mezcla de estética gótica, sensualidad y toques provocadores que desafiaron las expectativas. Aquí te contamos lo que presentaron algunos de los nombres más prometedores de esta edición.
Clement Couture: elegancia gótica
Clement Couture trajo una mezcla entre el romanticismo oscuro y la estética de Miércoles, la icónica serie. Sus vestidos, en blanco con detalles negros, ofrecieron una visión sofisticada, con capas y siluetas que remitían tanto a una quinceañera como a una figura gótica. Los detalles góticos, como corsés y encajes, crearon un equilibrio entre lo tradicional y lo vanguardista, marcando la diferencia en cada diseño.
Guilloz: un juego de texturas
La colección de Guilloz fue una fusión entre la ligereza y el movimiento. Su propuesta combinó el blanco como color predominante con detalles de flecos en vestidos y pantalones, que añadieron dinamismo y elegancia a la pasarela. Cada prenda parecía estar en constante movimiento, resaltando la fluidez y la sofisticación del diseño.
Retalhos: drama conceptual en blanco y negro
Con rostros cubiertos por encajes y modelos sin zapatos, Retalhos presentó una colección profundamente conceptual. Las siluetas góticas y vampíricas se mezclaron con un estilo coquette, donde faldas en capas de gasa y satén en blanco y azul se movían con ligereza. Los accesorios florales en los rostros de las modelos añadieron un aire teatral y misterioso, mientras que los diseños se destacan por una elegancia contenida pero poderosa.
Due Cuore: maternidad y sensualidad
La propuesta de Due Cuore fue un homenaje a la mujer embarazada. Con modelos luciendo orgullosamente sus barrigas, la diseñadora apostó por vestidos de encaje que combinaban sensualidad y pureza. Los flecos y detalles en satén blanco acentuaron las curvas, mostrando una feminidad poderosa, libre de estereotipos, donde la mujer embarazada se presentó como una figura sensual y elegante.
EntomicoAtómico: falda y capa para ellos
En un giro de género, Atómico apostó por faldas y capas en hombres. Los colores intensos como el verde y el morado neón marcaron la colección, mientras que las faldas confeccionadas con anorak y capas aportaron una visión futurista y atrevida. La propuesta desafió los límites tradicionales del vestuario masculino, trayendo a la pasarela una explosión de color y formas que celebraron la diversidad y la libertad de expresión.
Sereta Studio: pasión y provocación
El rojo fue el gran protagonista en la colección de Sereta Studio, que tomó la icónica figura de Carmen como inspiración. Con fruncidos que imitaban flores y vestidos que combinaban transparencias y satén, la diseñadora creó una serie de looks provocadores y exóticos. Las faldas blancas con corsés negros y tops rojos Carmen destacaron por su fuerte identidad visual, que evocaba tanto el flamenco como la alta costura.
Lustig: elegancia transparente
Lustig apostó por la transparencia como sello distintivo. Conjuntos de faldas y tops blancos con detalles en satén y espaldas descubiertas llenaron la pasarela de un aire minimalista pero impactante. Cada diseño ofrecía una visión pura y elegante, donde las transparencias se integraban perfectamente en siluetas sencillas pero imponentes.
Mirela Torres: masculinidad femenina
Mirela Torres desdibujó las líneas entre la moda masculina y femenina, presentando corsés en hombres y pantalones de encaje con alpargatas. Sus looks, llenos de referencias renacentistas y detalles piratas, también incluyeron faldas estilo tutú y lazos en los zapatos, sumándose a la tendencia coquette que dominó la pasarela. Su fusión de elementos masculinos y femeninos creó una propuesta que desafió las normas convencionales de género en la moda.
A: azul vibrante y guantes transformados
El diseñador A cerró la pasarela con una explosión de azul vibrante. Sus faldas, construidas a partir de guantes, ofrecieron una mirada única a la moda experimental. Los cinturones y guantes integrados en las prendas añadían un aire práctico pero con un toque surrealista. Sencillo pero imponente, demostró que, a veces, lo más simple puede ser lo más impactante. Los diseñadores emergentes del Clec Fashion Festival 2024 han demostrado que la moda sigue siendo un espacio fértil para la experimentación y la expresión personal. Desde la elegancia transparente de Lustig, pasando por el drama gótico de Clement Couture y la maternidad sensual de Due Cuore, cada colección trajo algo nuevo, audaz y emocionante. Las propuestas no solo rompieron moldes, sino que también expandieron los horizontes de lo que puede ser la moda en esta nueva era.
