El estudio de la Universidad CEU Cardenal Herrera, publicado en la revista Pain, ha puesto de manifiesto que es la formación del facultativo y su propia percepción del dolor la que determina el tratamiento que se propone a los pacientes.
El profesor de la CEU-UCH, Julio Doménech, ha dirigido este estudio en el que han participado 170 estudiantes de la Facultad de Fisioterapia de esta Universidad. El profesor Doménech ha recordado que las guías de práctica clínica recomiendan a los facultativos que a pesar del dolor “hay que mantenerse activo”; sin embargo, existe la creencia popular de que si tienes dolor lumbar debes hacer reposo y muchos médicos perpetúan esta creencia que limita la recuperación de los pacientes.
Los estudiantes fueron divididos aleatoriamente en dos grupos para potenciar sus conocimientos, unos en el modelo biomédico y otros en el biopsicosocial. Los alumnos a los que se potenció el modelo biomédico, a través de mayores conocimientos de anatomía y biomecánica, empeoraron sus creencias. De tal modo que al ser consultados tendían a recomendar reposo y a justificar que el dolor produce discapacidad. Sin embargo, el grupo de estudiantes a los que se propuso una intervención educativa favorable a recomendar las iniciativas de las guías de práctica clínica, eran favorables a promover el movimiento y el regreso a la actividad cotidiana para favorecer la recuperación de los pacientes con dolor lumbar.
De este modo, el estudio concluye la importancia de modificar las creencias de los facultativos para que recomienden un tratamiento acorde a las guías prácticas y favorable al movimiento frente al reposo en el caso de pacientes con dolor lumbar.
Un dolor que afecta al 80% de la población
El dolor de espalda baja o dolor lumbar provoca en los pacientes una amplia gama de limitaciones físicas. Varios estudios han demostrado que estas limitaciones tienen escasa correlación entre los daños estructurales en la columna vertebral. Sin embargo, han puesto de relieve que factores psicosociales, como el miedo al dolor, pueden llegar a tener una influencia mayor en la transición del dolor agudo a un dolor crónico.
El dolor lumbar afecta al 80% de la población en algún momento de su vida. Las lumbalgias generan unos costes totales equivalentes al 2% del PIB en España, unos 6.000 millones de euros al año, entre gasto asistencial, pérdidas de horas de trabajo e indemnizaciones.
Este estudio de la Universidad CEU Cardenal Herrera, publicado en la revista Pain, ha puesto de manifiesto que es la formación del facultativo y su propia percepción del dolor la que determina el tratamiento que se propone a los pacientes. En este sentido, desde la CEU-UCH se apuesta por desarrollar métodos de entrenamiento con los estudiantes para el tratamiento de la patología lumbar, desde aspectos biopsicosociales. Ya que según se desprende del ensayo realizado, un cambio en las creencias y actitudes sobre el dolor de espalda en las primeras etapas de formación podría conducir a cambios en las creencias duraderas y en la aplicación de las terapias y tratamientos acordes a las guías de práctica clínica. Tal y como recogen estas guías, el dolor lumbar mejora con la actividad, el regreso al trabajo es terapéutico y contribuye a una mejor recuperación de los pacientes con estas dolencias.