• La lucha contra el cáncer pasa en la actualidad por tratamientos específicos para cada paciente, con la personalización de dosis, según la doctora Vanesa Escudero, investigadora de la CEU-UCH en Elche
  • Con la monitorización de fármacos en oncología se podrá ajustar las dosis e identificar a un alto porcentaje de pacientes que, a priori, no alcanzarían la respuesta clínica. 

La doctora Vanesa Escudero lleva desde 2005 investigando sobre la Farmacología Cuantitativa y Farmacoterapia Personalizada, especialmente, en áreas vinculadas a la lucha contra el cáncer. La individualización posológica de quimioterápicos clásicos y pequeñas moléculas y las técnicas de modelización y simulación farmacocinética y farmacodinámica oncológica, son algunas de ellas. Aunque también está especializada en tratamientos de inmunioterapia del Cáncer, ahora está centrada en los desafíos de la monitorización de fármacos en oncología. Esta profesora de Enfermería en el CEU de Elche dirige en la actualidad dos proyectos de investigación, financiados por la Generalitat Valenciana. Uno de ellos ha permitido establecer un sistema de monitorización de imatinib, dasatinib y nilotinib en la práctica Clínica rutinaria para aumentar la eficacia y reducir la toxicidad de estas terapias en pacientes oncohematológicos.

La doctora Vanesa Escudero, investigadora del CEU en monitorización de fármacos en oncología

En el ámbito de la lucha contra el cáncer se ha puesto en valor el concepto de Medicina de precisión en oncología. ¿A qué se refiere este término?

Entre los principales avances en el tratamiento y en la investigación del cáncer, destaca poder establecer decisiones terapéuticas de forma individualizada para cada paciente. En función, no solo de las características genéticas del propio tumor, sino también de las características del propio paciente que puedan influir en factores como el metabolismo o la eliminación de los fármacos. En esta línea se acuña el término de medicina de precisión.

La medicina de precisión en oncología tiene un doble objetivo. Por un lado, permite que los pacientes oncológicos puedan recibir un tratamiento específico “guiado o dirigido” según el perfil genético de su tumor. Además, permite una personalización de las dosis administradas, minimizando la toxicidad y maximizando la efectividad de los tratamientos.

Este objetivo de la personalización de las dosis en oncología, se realiza mediante la Monitorización terapéutica de fármacos, una herramienta fundamental para la medicina de precisión. Dicha herramienta es la base del estudio del Grupo de Investigación en Farmacia y Nutrición Clínica de la Universidad CEU Cardenal Herrera.

Dada tu experiencia en bioanálisis y la monitorización de fármacos oncológicos y antidepresivos en la práctica clínica, ¿qué implica la personalización del tratamiento en oncología?

El estudio genético del propio tumor permite «conocer a cada tumor de cada paciente en concreto de forma más personalizada«. Una vez realizado, se selecciona un tratamiento farmacológico más específico. En definitiva, más favorable para el paciente. De forma convencional, estos tratamientos oncológicos se administran a dosis fijas o a dosis estándar basadas en el peso o en la superficie corporal. Estos parámetros, en la mayoría de ocasiones, no reflejan el metabolismo real de cada paciente. Es decir, distintos individuos, con dosis similares, pueden sufrir diferentes toxicidades o requerir más o menos dosis de fármaco. Por ello, conseguir en cada paciente un adecuado equilibrio entre toxicidad y eficacia continúa siendo un reto para los profesionales sanitarios encargados de la atención al paciente.

Gracias a los avances en la medicina de precisión, estos fármacos seleccionados previamente, serán monitorizados para ajustar sus posologías de forma individualizada. Atendiendo a factores inherentes al propio paciente (alimentación, otra medicación, otras patologías, factores farmacocinéticos individuales etc..). Es decir, se realiza un tratamiento “a medida” para cada paciente. Porque, “¿acaso imaginamos una zapatería donde únicamente dispongan de una misma talla para todos los clientes?

Existen numerosos estudios en la literatura científica que muestran el uso de dicha herramienta en la personalización de la dosis. Y evidencian que la individualización de la pauta posológica de un fármaco antineoplásico, basada en monitorización farmacocinética, mejora significativamente el número de respuestas objetivas, aumenta la supervivencia media libre de enfermedad y reduce la toxicidad.

Ventajas de las dosis personalizadas

¿Cómo se realiza la personalización de la dosis del tratamiento oncológico?

El proceso de monitorización para el paciente es sencillo. Para poder realizar la personalización de la dosis de fármaco es necesario disponer de ciertos datos que se recogen en la historia clínica del paciente. Además, una vez administrado por primera vez el fármaco (vía oral o vía intravenosa), se realizarán una serie de extracciones sanguíneas que permitirán conocer el comportamiento del fármaco en cada paciente. Con todos estos datos, se estimarán los parámetros farmacocinéticos individuales del fármaco en cada paciente. A partir de los cuales se realizará la recomendación de ajustes de dosis, en caso de que sean necesarios.

¿Qué beneficios aporta al paciente la personalización de las dosis?

La monitorización terapéutica de la terapia oncológica aportará al paciente numerosos beneficios. Conocer la cantidad de fármaco en sangre después de la administración del tratamiento, permitirá ajustar las dosis e identificar a aquellos pacientes que no alcanzarían la respuesta clínica  por estar «infradosificados» y a aquellos pacientes en los cuales los efectos adversos podrían limitar su tratamiento por estar «sobredosificados». “La prevención de efectos adversos indeseados mejorará la seguridad del paciente y esto se traducirá en un aumento de la calidad de vida.”

Vanesa Escudero dirige dos proyectos de investigación oncológica

Desafíos actuales

¿Cuáles son los retos en la Monitorización de fármacos en oncología?

La monitorización terapéutica de fármacos es un reto en el que trabajar con el objetivo de poder ampliar la máxima cobertura en la terapia oncológica. Implementar dicha herramienta en la práctica clínica rutinaria permite, además de los beneficios para el paciente, estar a la vanguardia de investigación. Además, “la puesta en marcha de esta herramienta debe ir acompañada de proyectos de investigación que permitan generar y compartir información. De esa forma, permite fomentar el conocimiento en este campo con el único objetivo de prestar una mejor atención al paciente con cáncer”.

¿En qué trabaja el Grupo de Investigación en Farmacia y Nutrición Clínica del CEU, del que eres la Investigadora Principal?

Estamos trabajando en el desarrollo de nuevas técnicas de bioanálisis para la cuantificación de fármacos en pacientes oncológicos. Y también en el desarrollo de modelos farmacocinéticos necesarios para la personalización de la terapia. Actualmente, está colaborando de forma activa en investigaciones llevadas a cabo por el Hospital General Universitario de Elche, el Hospital Vega Baja, el Hospital General Universitario de Alicante y el Hospital Quironsalud de Torrevieja.

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