• Estudiantes y profesores del Grado en Odontología y Dentistry de la Universidad CEU Cardenal Herrera colaboran con la Fundación Odontología Solidaria para acercar la salud dental a familias en situación de vulnerabilidad
Estudiantes y profesoras junto a las higienistas de la Fundación Odontología Solidaria en Valencia, «Esther y Mayte son dos ángeles en medio de una clínica de campaña». 

“Tenemos que cruzar el Mercado Central, después la avenida del Oeste, y girar a la derecha para adentrarnos en la calle Balmes. Allí encontramos la clínica de la Fundación Odontología Solidaria, una clínica donde se atiende a personas en riesgo de exclusión social, todas ellas derivadas de los Servicios Sociales. Laura Marqués, profesora del Grado en Odontología de la Universidad CEU Cardenal Herrera, nos explica la labor de esta Fundación que realiza aquellos tratamientos que la Seguridad Social no cubre, tratamientos enfocados al saneamiento de la cavidad bucal como higienes bucales, curetajes, obturaciones, endodoncias, y restauraciones de la función masticatoria mediante prótesis removibles. La labor de sus profesionales junto a la colaboración de voluntarios y voluntarias ha beneficiado a más de 1600 personas en 2016, solo en Valencia. A este equipo solidario se han sumado profesores y estudiantes de Odontología y Dentistry de la CEU UCH. Con ellos, hemos conocido hoy un proyecto que, cada día, devuelve la sonrisa a niños y mayores, profesionales y pacientes”.

  • ¿Cómo comenzó esta colaboración con la Fundación Odontología Solidaria?

La idea surgió al comprobar que muchas familias carecen de recursos para desplazarse hasta la Clínica Odontológica de la Universidad, sobre todo, los que solicitan ayuda desde otras localidades y que han de venir a Valencia primero. La Clínica de Odontología Solidaria es la única disponible en el centro de la ciudad. La profesora María Carmona comenzó a colaborar con Mª Dolores Cuenca, la directora de Odontología Solidaria, y se acercó a la clínica para hablar con Olatz, la trabajadora social, y Esther y Mayte, las higienistas. Más tarde, la vicedecana de Odontología Cristina Ribes y la directora de la Clínica María Lloria se encargaron de impulsar esta colaboración.

¿Cuántos estudiantes y profesores participan en el proyecto?
Se inició la colaboración con estudiantes del Máster de Odontopediatría Integrada. Este año, estamos colaborando profesoras del Máster de Odontopediatría y de la asignatura de 5° Practicum Infantil, además de 63 estudiantes del Grado en Odontología y Dentistry. Junto con la profesora Esther García, hemos animado a todos los estudiantes que han querido participar, de manera totalmente voluntaria.

– ¿Cuál es vuestra labor en la Clínica?

Nuestra labor es tratar las caries en dentición temporal facilitando una experiencia dental muy positiva a estos niños que en la mayoría de las ocasiones vienen acompañados de un gran temor. En ocasiones, es difícil trabajar con ellos, hace falta experiencia, incluso hablar distintos idiomas. Las profesoras trabajamos con la colaboración de los estudiantes, que aprenden lo que es una Odontología solidaria de supervivencia.

– Atendéis niños pequeños ¿cuáles son los principales problemas que presentan?

Trabajamos con niños pequeños independientemente de la edad, pero colaboradores o potencialmente colaboradores, y siempre realizando obturaciones o tratamientos pulpares en dientes temporales. Incluso hacemos Ortodoncia Interceptiva con Rehabilitación Neuroclusal que evita en el futuro problemas muy graves de ortodoncia. Si es necesaria una sedación consciente se remiten a la Dra. Ana Leyda en la Clínica Odontológica CEU UCH.

«Hay que concienciar a los padres de la importancia de la salud bucodental para un desarrollo óptimo de los niños»

– ¿Cuáles son las claves en la salud dental de los niños?

Lo más importante es la prevención. Necesitamos concienciar a los padres tras realizar el tratamiento restaurador de la importancia de la salud bucodental para un desarrollo óptimo del niño. Debemos enseñar cuáles son los alimentos más cariogénicos y dar pautas nutricionales y de higiene oral.

– ¿Cómo valoras esta experiencia de voluntariado?

Ya el primer día, salimos con una gran sonrisa de allí. Esther y Mayte, las higienistas, son dos ángeles en medio de una clínica de campaña, pero muy eficiente gracias a su labor y a su alegría. Podemos tratar a los niños de las patologías severas que presentan, y ayudarles a que crezcan sin miedo ni ansiedad al dentista. Además de trabajar con los estudiantes para que conozcan otras realidades sociales y se impliquen en su comunidad.

Las profesoras María Carmona y Laura Marqués conversan con una joven paciente en la clínica.
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