A Anna Maria Sayós le gustan los retos; es consciente del aprendizaje que proporciona salir de ‘la zona de confort’ y las etiquetas. Lleva ocho años colaborando con el European Youth Parliament. Y hace tres, durante la pandemia, decidió dar un giro de 180 grados a su vida. Se dejó el Grado de Ingeniería Industrial y apostó por Medicina. Primero lo vivió como un desafío y ahora ha descubierto lo que seguramente intuía: que era su auténtica vocación. Sus reflexiones no tienen desperdicio. 

Anna, acabas de volver de una sesión del European Youth Parliament (EYP) en Valencia para abordar, con jóvenes de toda Europa, aspectos relacionados con temas de actualidad como la crisis de los refugiados o el cambio climático. Cuéntanos cómo son estos encuentros. 

Sí. Soy miembro del EYP desde hace ocho años, y las sesiones son los eventos por excelencia a los que atendemos para debatir sobre cualquier temática que represente un problema a nivel europeo.  

En estas sesiones se simulan sesiones plenarias del Parlamento Europeo, en las que jóvenes a partir de los 15 años diseñan soluciones por comités. Estas soluciones se presentan a los demás comités, que las debaten y finalmente votan a favor o en contra. 

‘El formato y la estructura de este proyecto me fascinaron desde el primer momento; ya he participado en más de 20 sesiones a nivel regional, nacional e internacional’

Parece muy interesante. ¿Por qué te integraste en este proyecto?  

Siempre he sido una persona muy inquieta, con curiosidades en los distintos ámbitos de conocimiento. En el colegio estudié el bachillerato científico, pero me interesaba también la filosofía, las lenguas, la economía y la historia. En 2015, como una actividad extraescolar, me ofrecieron participar en una de las sesiones regionales que se celebraban en mi ciudad. El formato de las sesiones y toda la estructura que había detrás me fascinó desde el primer momento, así que decidí implicarme más en la organización, y desde entonces he participado en más de veinte sesiones a nivel regional, nacional e internacional.  

Arrancaste como una participante más, pero ahora has asumido más responsabilidades… 

Sí. Cuando empecé, asistía a las sesiones como delegate, participando en los debates que se llevaban a cabo y, a medida que avanzaba, fui pasando por diferentes equipos: el equipo académico, como responsable de un comité, el equipo organizativo, encargándome de la parte más logística de los eventos, y el equipo del jurado, como ocurrió en esta última sesión en Valencia.  

Y, además de implicarme en las sesiones que se van celebrando, los últimos cuatro años he estado en el Comité Nacional, ejerciendo el rol de Teachers’ Manager. Es decir, encargándome de todo el profesorado de los colegios que participan en sesiones en España.  

‘He adquirido aprendizajes importantes a nivel personal: liderazgo, trabajo en equipo, organización y capacidad de adaptacion, entre muchos otros’

Aunque los temas que se abordan en las sesiones no están relacionados necesariamente con la salud, el aprendizaje que te está aportando esta experiencia debe ser inmenso… 

Sí. Podría organizar todos los aprendizajes en tres ámbitos distintos. En primer lugar, en el ámbito de conocimiento sobre la Unión Europea, su funcionamiento y sus instituciones.  

Además, a lo largo de los años, he tenido la oportunidad de mantenerme informada de debates que se estaban llevando a cabo en los comités de la UE sobre temas de industria, economía, crisis humanitarias, el cambio climático o la salud, tema que me ha generado especial interés últimamente por mis estudios de Medicina. También entra en juego todo lo que son habilidades relacionadas con la comunicación: aprender a debatir, hablar en público, dar discursos, entender documentos oficiales e incluso redactarlos; y todo esto en inglés, lo que me ha dado mucha fluidez con el idioma.  

Y finalmente, y lo más importante desde mi punto de vista, los aprendizajes que he adquirido a nivel personal: liderazgo, trabajo en equipo, organización y capacidad de adaptación, entre muchos otros.  

¿Crees que esta ‘mochila de aprendizajes’ te será de utilidad cuando ejerzas la medicina? 

Estoy segura. Viajar y conocer a personas de distintos países y de mentalidades completamente diferentes -opuestas incluso- ha supuesto un aprendizaje increíble para mí.  

El EYP me ha proporcionado el espacio para aprender no solo a relacionarme con las personas, sino a trabajar juntas, conocer y entender distintos puntos de vista y aprender de ellos, y abrir la mente a las miles de realidades que nos rodean. Creo que esto implica un bagaje no solo importante, sino esencial, tanto para relacionarse con los pacientes como con las personas que van a formar parte de nuestros equipos de trabajo en el hospital.  

‘Trabajar con otras personas y entender otros puntos de vista me ha proporcionado un bagaje esencial para relacionarme con mis futuros pacientes y colegas’

Adivinamos la respuesta, pero toca preguntarte. ¿Recomiendas a tus compañeros inscribirse en este proyecto?  

Por supuesto. Pero, como siempre digo, el EYP es solo una de las muchas iniciativas que existen para disfrutar de este tipo de experiencias y aprendizajes. 

Creo que nuestras generaciones tenemos la gran suerte de que, con implicarnos solo un poco, podemos acceder a proyectos muy interesantes, en cualquier ámbito de conocimiento, que nos aportan mucho, sobre todo las softskills, tan buscadas hoy en día. Así que sí: invito a mis compañeros y a los jóvenes que nos lean a sumarse a proyectos como el EYP o cualquier otra iniciativa que les permita salir de su zona de confort, abrir la mente y aprender cosas que “no están en los libros”.  

La estudiante de Medicina recomienda disfrutar de experiencias como esta para aprender ‘lo que no está en los libros’ y salir de la zona de confort

Pues ahora volvemos al ámbito académico. Como decíamos antes, estás en segundo de Medicina, una carrera especialmente exigente. ¿Cómo compaginas el estudio con tus responsabilidades en el EYP? 

Como todo en esta vida, es cuestión de una buena organización. Nunca he sido una persona muy disciplinada, y estar ocupada con muchas cosas a lo largo de los años me ha obligado a mantener un cierto orden y trabajar la fuerza de voluntad.  

Cuando quieres dedicar mucho tiempo a muchas cosas a la vez, y lo haces porque lo disfrutas, tienes que encontrar la manera de hacerlo funcionar; con el tiempo aprendes a priorizar, a ser más eficiente con las horas que dedicas y a rodearte de gente que te pueda echar un cable cuando lo necesitas.  

‘Al principio, estudiar Medicina fue más un reto que una vocación, pero ahora estoy plenamente convencida e ilusionada con mi futuro profesional’

Anna, lo tuyo no es un caso típico de vocación temprana por la medicina. Antes de apostar por esta carrera, te matriculaste en Ingeniería Industrial. Cuéntanos.  

Sí. Cuando tenía 17 años, y llegó el momento de tomar una decisión, estaba un poco confusa. Muchas carreras me parecían interesantes y, no siendo del todo consciente de la importancia de mi elección, entré en Ingeniería Industrial. Con el paso de los cursos vi que, aunque las salidas profesionales, especialmente el mundo de la empresa, me podían interesar, no era suficiente motivación para continuar y, aunque soy del parecer de que las cosas que se empiezan hay que acabarlas, decidí dejar la carrera después de tres años.  

Eran tiempos de Covid y nos cogió el confinamiento con una abuela enferma de Alzheimer en casa, lo que influyó en mi decisión de empezar Medicina. Al principio, era más un reto que una vocación. Ahora, después de año y medio, puedo decir que estoy plenamente convencida y especialmente ilusionada con el futuro profesional que está por llegar.  

Nos alegra mucho que hayas encontrado tu camino. ¿Por qué elegiste el CEU? ¿Estás contenta con tu experiencia en esta universidad?  

El acceso a Medicina, especialmente estos últimos años, se ha convertido en un camino difícil y una meta casi inalcanzable. En mi caso, además, se sumaba el hecho de empezar más tarde y viniendo de una formación que nada tenía que ver con la medicina. Por todo ello, el CEU para mí ha supuesto la oportunidad de volver a empezar y perseguir mi sueño de ser médico algún día.  

Valoro mucho, además, dos cosas de la universidad: los valores que transmiten y cómo el paciente es siempre el centro de nuestro aprendizaje y futuro ejercicio.  

‘El CEU para mí ha supuesto la oportunidad de volver a empezar y perseguir mi sueño de ser médico algún día’

¿Dónde te gustaría verte trabajando en unos años?  

Para decidir la especialidad aún es un poco pronto. Aunque sí que empecé la carrera con alguna idea en mente, a medida que voy cursando asignaturas, voy descubriendo especialidades que ni siquiera conocía y abriendo nuevos horizontes.  

Lo que sí tengo claro es que, sea la especialidad que sea, quiero ejercer la medicina cerca de las personas, lo que, en su momento, fue mi principal motivación para dar un giro de 180º a mi vida. 

Anna, muchas gracias y te deseamos todo el éxito del mundo en tus desafíos.

A vosotros.

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