Un espacio diferente en Valencia, donde se puede comprar moda sostenible mientras se disfruta de un café. En el centro de la capital del Turia, pero con clientes en toda Europa. Físico, aunque progresivamente online. Y siempre con la mirada puesta en la ética y la sostenibilidad.
El origen, bastante peculiar: reinventar las pajaritas… Pero, sobre todo: formación, valentía, esfuerzo y muchas ganas.
Poppyns es un proyecto único, como nos explica su confundadora, la alumni de Publicidad y CAV del CEU Elena Vilata. En esta entrevista también comparte algunas claves para que los publicistas se hagan un hueco en el complejo mundo de la moda. 

Cofundadora de Poppyns, en pleno centro de Valencia. No es una tienda de ropa, ni un café. Es mucho más. ¿Puedes resumirlo en un par de frases? 

Poppyns es un espacio donde descubrir, dejarse llevar y comprar diferente. Un espacio de reunión, donde sentirse como en casa.   

No es fácil entender un proyecto tan peculiar…  

Poppyns alberga una cafetería dentro de su espacio, la cual aporta una experiencia de compra completa a nuestros poppyners donde sentirse como en casa.  

Y, como dices, cuando empezamos no se entendía muy bien el concepto. La gente nos preguntaba, ¿pero es una tienda?, ¿es una cafetería?, ¿qué es esto?, ¿sois una franquicia? (risas) 

Ha llevado tiempo explicar qué somos, pero la verdad es que hoy podríamos decir que estamos muy satisfechos, y creo que poco a poco hemos conseguido transmitir lo que es Poppyns para nosotros.  

‘Ha llevado tiempo explicar qué somos, pero poco a poco hemos conseguido transmitir lo que es Poppyns para nosotros’

Ahora volveremos al camino recorrido hasta llegar aquí. Pero sigamos en el presente. Detrás de Poppyns, hay una forma de pensar, que se refleja en vuestro magazine, en línea con los ODS del Milenio. Por ejemplo, garantizar modalidades de consumo y producción sostenible. Cuéntanos. 

La moda debe ser sostenible. Simplemente por el hecho de que la industria de la moda es la segunda más contaminante a nivel mundial, tal y como señala la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).   

Al año, se vierten al mar medio millón de toneladas de microfibra, lo que equivale a tres millones de barriles de petróleo, según la ONU. Y el Mediterráneo, en concreto, es uno de los mares con mayor nivel de contaminación plástica del mundo.  

Con estos datos, deberíamos tener suficiente para no plantearnos si hay opción…

El proyecto de la alumni del CEU es un espacio diferente, donde comprar moda sostenible mientras se disfruta un café

Y tanto. Elena, ¿por qué te metes en estos berenjenales éticos siendo empresaria?  

Creo que todos, a nivel empresarial, tenemos la responsabilidad de mejorar nuestra sociedad y el mundo en el que vivimos de alguna manera.  

Por ejemplo, por la parte que nos toca, el Blackfriday hace muchísimo daño al sector. El impacto en el medioambiente, los fraudes en las ofertas, la repercusión en el pequeño comercio y el riesgo para la ciberseguridad son otros factores a tener en cuenta cuando hablamos de este día y la compra por impulso. 

Poppyns cerró el día de Blackfriday en su primer año de vida. Un día después de su apertura.  

El segundo año colaboramos con Ecoalf lanzando la campaña Greenfriday, donde donamos parte de nuestras ventas a esta fundación para la recuperación selectiva de residuos con el fin de reciclarlos, valorizarlos y evitar su impacto nocivo en el medio ambiente. 

Creo que es cuestión de que todos aportemos nuestro granito de arena. Al final, “tota pedra fa paret”. ? 

‘La moda debe ser sostenible. Simplemente por el hecho de que esta industria es la segunda más contaminante a nivel mundial’

Vuestro modo de entender la moda trasciende fronteras. Vendéis a Europa. ¿Cómo habéis logrado haceros un hueco internacional con la que cae? 

Bueno… ¡todavía estamos en ello! (risas). La competencia es gigante.  

Creo que el secreto está en no olvidar quién eres, cómo eres y lo que quieres transmitir. De esa manera se genera una diferenciación orgánica.  

Acercamos lo que somos al mundo, creemos en nuestro proyecto y trabajamos cada día para hacer ese hueco cada vez más grande. Pero sin obsesionarnos. Poco a poco y con constancia, confiamos abarcar de forma responsable el mercado europeo, y eso sí, con mucho respeto.   

No te niego que yo soy la primera que se sorprende y da saltitos de alegría cuando nos entra una venta de Francia o Italia… 

Los fundadores de Poppyins
Junto a su marido, cofundador de Poppyns, Elena está trabajando en un marketplace para hacer crecer su proyecto

Normal… ¿Objetivos de Poppyns a corto y medio plazo? 

Puedo adelantaros que estamos a punto de lanzar nuestro propio marketplace: un espacio online donde encontrar miles de productos diferentes, seleccionados uno a uno por nosotros, y pensado por y para nuestros poppyners.

¡Tenemos muchas ganas de que lo veáis! 

‘El secreto está en no olvidar quién eres, cómo eres y lo que quieres transmitir. De esa manera se genera una diferenciación orgánica’

¿Este desarrollo online es consecuencia de la pandemia? ¿La COVID ha supuesto un problema o, al contrario, un revulsivo para reinventaros? 

Como dices, la pandemia ha sido un alto en el camino y creo que todos en cierta manera nos hemos visto sobrecogidos por lo que se avecinaba en nuestro sector. También es cierto que nosotros siempre hemos estado en movimiento, y creo que situaciones como esta provocan ese esfuerzo extra para seguir vivos. Por eso esta situación nos ha servido para dar un impulso a aquello que estábamos desarrollando a nivel online y a lo que, por el día a día -que nos consume- no estábamos dedicando suficiente tiempo.  

El confinamiento nos sirvió para redirigir partes de nuestro modelo de negocio que habíamos dado por hechas e incluso para centrar el foco.  

Nuestra tienda física es para nosotros nuestro motor, la parte tangible de Poppyns, donde conectar de forma más humana con nuestro cliente. Sin embargo, siempre la hemos acompañado de la parte online, donde poder estar presentes en todo momento. Son dos mundos que conviven y que estamos afrontando como tarea este 2020. Poder unir los dos mundos al 100% este año para dar el servicio que realmente nos gustaría dar. 

 Moda sostenible en Valencia. La publicista formada en el CEU apuesta por un consumo de moda responsable con el medioambiente

Otro reto que sumar a los que muchos que habéis ido alcanzando. Volvamos al camino recorrido, que nos ayudará a entender mejor vuestro presente. Poppyns es consecuencia de otro proyecto innovador. Unas pajaritas, por curioso que suene…

Sí. Yo estuve en París durante un año para estudiar diseño de moda, y a la vuelta me di cuenta del auge que tenía en ese momento un complemento: la pajarita. De modo que nos lanzamos David (mi marido y cofundador de Poppyns) y yo, junto a varios familiares, y nos pusimos a coser nuestras pajaritas al salir del trabajo.  

Al poco tiempo, habíamos creado una marca de pajaritas, Enshock. Trabajamos mucho la marca y la posicionamos online, y decidimos acercar nuestro producto al cliente final también de manera tangible. Así que detectamos varios pop-up locales en fechas navideñas y alquilamos un corner para vender nuestras pajaritas en un espacio físico.  

Pero no era el espacio que precisabais… 

Justo. Enseguida nos dimos cuenta de lo poco que nos rentaba ese modelo. Suponía un esfuerzo económico muy elevado, el cliente era muy específico de la zona y nuestra marca se veía distorsionada, ya que convivía con otras muy distintas.  

Una vez probamos distintos pop-ups, fuimos preguntando a varias marcas que participaban, para aglutinar los problemas más comunes en este tipo de modelos.Muy pronto nos dimos cuenta de que todos sufríamos por lo mismo, lo testeamos también en Europa y pensamos: ¿Por qué no crear un espacio, donde marcas con historia y un producto cuidado puedan convivir y además aportemos a Valencia una compra y un espacio diferente? 

‘Estudiar Publicidad despertó en cierta manera mi curiosidad para todo. Por todo aquello que hace a una persona decidirse a hacer algo’

Y ahí está Poppyns… Elena, cuentas con una intensa carrera profesional vinculada al mundo de la moda. ¿Qué puede aportar una comunicadora como tú al sector? 

La moda para mí es un medio de expresión. Tanto la moda como cualquier sector y actividad relacionado con la artesanía, el buen hacer y las personas.  

Estudiar Publicidad despertó en cierta manera mi curiosidad para todo. Por el “fondo” de las cosas, por todo aquello que hace a una persona decidirse a hacer algo, o por eso que nos mantiene en constante movimiento.   

Creo que las personas no somos claves para el éxito de una marca, pues ellas son el éxito por sí mismas, tienen historias que contar y un alma en su producto. Pero nosotros, los profesionales, somos los puentes que conectan las marcas con  las personas, y las acercamos y comunicamos de la mejor forma que sabemos hacerlo, apoyándolas por el camino.   

Tú tienes claro que no todo está inventado. ¿Continúa habiendo muchas oportunidades para hacerse un hueco en el mundo de la moda?  

Efectivamente, soy de las que creen que siempre existe una oportunidad. El mundo cambia cada día, el hoy ya es mejor que ayer. Cada día aprendemos y eso nos da la oportunidad de poder descubrir y buscar oportunidades.   

En concreto, el mundo de la moda está en continua evolución. Todos los días descubrimos formas nuevas de hacer las cosas y es cuestión propia el saber qué quieres hacer o qué camino tomar.   

‘Soy de las que creen que siempre existe una oportunidad. El mundo cambia cada día, el hoy ya es mejor que ayer’

¿Emprender es la clave? 

Es el mejor máster. Creo que en estos años he cometido todos y cada uno de los errores que tenía que cometer. Me he enfrentado a situaciones que creía que nunca iba a vivir.   

Me llevo bastantes de los mejores momentos de mi vida, y también la experiencia de seguir creciendo cada día.   

He trabajado y cambiado aspectos de mi forma de ser… la paciencia, la perseverancia y la admiración por la gente que me rodea se palpa día a día. Es una experiencia que, a base de tortazos y premios, te curte y es, sobre todo, muy emocionante.  

‘Emprender es el mejor máster. Creo que en estos años he cometido todos y cada uno de los errores que tenía que cometer’

Transmites esa emoción. Pregunta obligada: estudiaste CAV y Publi en el CEU. ¿Qué destacarías de este periodo?  

La verdad es que recuerdo mi etapa en el CEU con muchísimo cariño. Es cierto que, cuando llevas unos años, sientes más afinidad hacia una u otra carrera. En mi caso, la publicidad me enamoró. La estudiaría de nuevo si pudiera, porque realmente la disfruté.   

De esa etapa me quedo, sobre todo, con los amigos que me llevé y siguen estando ahí hoy en día, también las clases donde romperte la cabeza cuando se trataba de creatividad y, tal vez también, fue la época donde me quité los miedos y empecé a sentir lo que realmente quería hacer. 

Poppyins es un espacio diferente para comprar moda sostenible

No es poco aprendizaje. ¿Compartes algunos consejos con los jóvenes que están hoy en esas aulas?  

Que exploten al máximo las oportunidades que se les presentan. En las prácticas, concursos… es donde desarrollas más esa parte tangible de lo aprendido. Y siempre te llevas experiencias y conocimientos nuevos.   

También les diría que no tengan miedo de tirarse a la piscina, de arriesgarse. Que se mantengan despiertos, que no pierdan nunca la curiosidad y que sean honestos y humildes con uno mismo y con los demás.  

Elena, muchas gracias y mucho éxito en este y próximos retos.  

A vosotros. 

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